El Celta B ha encontrado en Borja Iglesias uno de sus pilares básicos en la actual temporada. Y el delantero lo confirma con goles y además rompe con registros históricos. El filial se enfrentó el pasado domingo al Caudal de Mieres y fue derrotado por 3-2. Los dos tantos del conjunto vigués los anotó Borja Iglesias, lo que permite superar a Goran Maric en el total histórico del conjunto céltico en la Segunda División B. El actual delantero titular suma 53 goles, uno más que el recordado jugador serbio. El Celta B todavía no ha terminado la primera vuelta de la liga, por lo que es casi seguro que Borja Iglesias mejorará de forma considerable ese registro.

Es una temporada para recordar también en el aspecto goleador. Borja Iglesias ya tiene doce en su casillero. En la actual campaña ya le marcado al Caudal, Boiro y Somozas, dos goles a cada uno, y al Tudelano, Valladolid B, Racing de Ferrol, Pontevedra, Palencia y Racing de Santander. Su producción de goles también le permite ser uno de los máximo goleadores de la categoría, ya que ocupa el primer lugar junto a Joselu (Racing de Ferrol), Benja (Leonesa) y Dani (Racing de Santander).

Esta es la cuarta temporada de Borja Iglesias en el Celta B. En la primera anotó 13 tantos, en la segunda llegó a los 17 y en la tercera acumula 12, los mismos que en la actual. El delantero señala que "llevo una buena media, pero creo que esta temporada va a ser superior a las anteriores. El agradecimiento y el mérito también es de mis compañeros. Sin ellos no podría hacer tantos goles". Insiste en que "no me pongo cifras a las que llegar. Lo importante es que el equipo pueda ganar".

El futbolista reconoce que "es un orgullo poder ser el máximo goleador del Celta B en la Segunda División B. No me lo esperaba". Reconoció que "me han dicho que Maric fue un excelente jugador. Por sus números tampoco lo pongo en duda".

Goran Maric estuvo siete temporadas en el Celta B y su mejor campaña fue en 2007-2008 en la que anotó 21 goles y se convirtió en el máximo realizador de la categoría. Curiosamente, el entrenador en aquella época era Alejandro Menéndez, en la actualidad entrenador del filial celeste. Recuerda aquella época con "nostalgia, pero también me permitió conocer a grandes amigos".