El Club Vigo resolvió de forma satisfactoria un encuentro en Dumbría que se presentaba complicado. Máxima igualdad en todos los aspectos, en el que los vigueses no supieron rematar el encuentro antes de llegar a un empate a dos sets. El quinto fue raro, con grandes ventajas visitantes y, luego, muchos fallos que propiciaron la victoria final.

El partido comenzó con sucesivos empates, pero fueron los vigueses los primeros que se distanciaron. Se pasó del empate a 6 puntos a doblar los guarismos para los vigueses poniéndose con un claro 6-12. De ahí pasaron a un 9-18 que ya ponía en franquicia el primer parcial para los vigueses.

El segundo comenzó con los vigueses excesivamente relajados. Llegaron a empatar a 23 puntos pero dos jugadas de fortuna para los locales hicieron que empatasen el encuentro. El tercer set comenzó muy igualado. Fueron los vigueses los que primero acertaron a conseguir una pequeña ventaja de dos puntos 10-12. Esto les dio la suficiente tranquilidad para aumentarla hasta cinco puntos (13-18) lo que les dio tranquilidad.

Ya tenían conseguido uno de los puntos en disputa pero querían traerse los tres. En el cuarto parcial fueron los locales los que cometieron menos fallos. Finalizaron el set con ese 25-20.

Se jugaba todo en el quinto set. Nervios en las gradas y sobre todo en el terreno de juego pero fueron los vigueses los primeros que se fueron en el marcador de hasta cuatro puntos 4-8, para el cambio de campo. A partir de ese momento los grandes bloqueos y el acierto en los ataques vigueses hicieron el resto.