El Celta juvenil dio ayer un golpe de autoridad con una contundente victoria en A Coruña frente a un Deportivo que da un paso atrás en su lucha por alcanzar los dos primeros puestos de la clasificación. Los coruñeses se quedan ahora a nueve puntos de los vigueses en este arranque de la segunda vuelta de la competición.

El Celta hizo un gran partido, serio en defensa y muy metido en el partido, consciente de la importancia de lograr los tres puntos ante el eterno rival. No tardaron mucho los jugadores entrenados por David de Dios de adueñarse del centro del campo, lo que le permitió tener la posesión del balón y jugar con relativa tranquilidad, ya que los herculinos no eran capaces de sacarse la presión de encima.

A pesar del dominio, el gol no llegaba, lo que beneficiaba a un Deportivo que lo estaba pasando mal.

Sin embargo, mediado el periodo, Gabri superaba al portero del Deportivo y el Celta se adelantaba en el marcador. Un tanto que le valió para consolidar su dominio ante un Deportivo que se estiró buscando igualar el encuentro.

A comienzo de la segunda parte, el Deportivo se fue arriba y el Celta, bien colocado, recuperaba el balón para salir a la contra. Así, en una de ellas, José Sobrido hace el segundo para el Celta, con lo que todo queda visto para sentencia. Riki sentenció el partido cuatro minutos más tarde.