El Atlético de Madrid desveló el nombre de su nuevo estadio, Wanda Metropolitano, y anunció cambios en su escudo para la temporada 2017-18, en un acto multitudinario en el Vicente Calderón, arropado por las primeras plantillas masculina y femenina y leyendas del club.

La expectación era máxima. No había ni un solo sitio libre en la sala, con un lema en cada pantalla, 'historia y futuro', ni en la zona de invitados ni en el sector de la prensa ni en los laterales. Todos aguardaban un momento esperado, el nombre del estadio, y recibieron una novedad más: la modificación del escudo para la campaña 2017-18.

El emblema, el duodécimo, según el club, de la historia del Atlético, ya sólo tendrá tres colores, rojo, blanco y azul, será más redondeado en sus perfiles, varía sustancialmente el diseño del oso, que mira hacia el otro lado, y el madroño, que aumenta su tamaño, además de que pierden el verde y el negro, respectivamente, por un tono azul. También desaparecen el marrón y el amarillo.

Permanecen las siete estrellas que rodean el oso y el madroño, por arriba, y las rayas rojiblancas -cuatro rojas y tres blancas-, por abajo, aunque hay una blanca menos que ahora. Lo ha diseñado el estudio Vasava. Desde la "responsabilidad" de no poder "defraudar a nadie" trabajó en un emblema con "los mismos valores, las mismas ideas y que tenga una mirada al futuro", según explicó en un vídeo.

"Una evolución", lo calificó el Atlético, que explicó que se "mantiene la estructura formal consolidada redondeando ligeramente la parte superior como guiño al primer escudo del club de 1903", "se acentúa la apuesta por Madrid" y "desaparecen el negro, marrón, verde y amarillo, para dar protagonismo a los colores fundamentales del equipo, el rojo, blanco y azul modificando su intensidad y tono siendo ahora como los utilizados en la primera etapa del club".

"El cambio del escudo es positivo; al principio puede llamar la atención. Cualquier cambio llama la atención, pero va a ser un escudo limpio que transmite lo que quiere ser el Atlético de Madrid", dijo el mítico delantero José Eulogio Gárate en un vídeo.

Antes, a las 13.25 horas se conoció cómo se llamará el nuevo estadio: "Wanda Metropolitano, un nombre lleno de historia y de futuro". Lo desveló Enrique Cerezo, presidente del Atlético, desde el estrado instalado para el evento, delante de una pantalla gigantesca que había rememorado antes imágenes imborrables de la historia rojiblanca y que había repasado el viaje por diferentes estadios, pasando por el Metropolitano, su casa hasta el año 1966.

De ese campo, en el que el conjunto madrileño jugó desde 1923, al principio de forma intermitente, porque el estadio tuvo que ser remodelado en varias ocasiones, una de ellas tras la Guerra Civil, hasta su mudanza al Vicente Calderón, en octubre de 1966, procede el apellido de su nuevo hogar, un recuerdo esencial en su historia.