Gustavo Cabral advirtió ayer de la dificultad del partido, a pesar de que el Panathinaikos no se juega esta noche, por lo que consideró necesaria "mucha cabeza" y no "obsesionarse" con marcar muchos goles. "Este partido sí que es una final. Hay que ganar y por la mayor cantidad de goles que podamos hacer. Pero no nos tenemos que confundir, el partido dura 90 minutos y no podemos intentar marcar cinco goles en los primeros veinte minutos", señaló. "Nosotros tenemos que centrarnos en nuestro partido, olvidarnos de lo que haga el Standard", apuntó Cabral, para quien marcar pronto sería "muy importante". "El primer gol será el más difícil, el que tenemos que buscar con mayor empuje porque creo que una vez hagamos ese primero los espacios aparecerán", destacó.