La suerte está echada. Sin margen de error y con la ilusión por bandera, se juega el Celta a una sola carta su futuro en Europa. Visita el conjunto de Berizzo al Panathinaikos (Apostolos Nikolaidis, 21.05 horas) en el último encuentro del Grupo G de la UEFA Europa League en busca de una plaza en el bombo que sorteará el lunes en Nyon (Suiza) los dieciseisavos del final del torneo.

El inesperado tropiezo la pasada jornada en Balaídos frente al Standard de Lieja, con el empate rebañado por los belgas en los últimos minutos, ha complicado las opciones del Celta, que necesita mejorar el resultado que consiga el cuadro valón, que recibe en esta última jornada al Ajax de Amsterdam en el estadio Maurice Dufrasne de Lieja.

Tanto los holandeses, cómodamente clasificados como primeros de grupo, como los griegos, ya eliminados, no se juegan nada en el envite. El técnico del Ajax, Peter Bosz, ya ha adelantado que jugará en Lieja con los suplentes. También lo hará el Panathinaikos, aunque su nuevo técnico, Marinos Ouzounidis, ha anunciado que su equipo buscará enérgicamente la victoria para congraciarse con su decepcionada afición. En todo caso, el Celta y el Standard pugnan por hacerse con la segunda plaza del grupo con casi todos los parámetros igualados. Ambos suman seis puntos y tienen empatado el coeficiente particular de goles, pero los belgas superan de momento en un gol a los celestes en el coeficiente general. En estas circunstancias, el Celta está obligado a mejorar el resultado que consiga el Standard o bien igualarlo y marcar un gol más de los que consiga su adversario para clasificarse por mayor número de goles -suma 8 por 7 de su rival- anotados durante la fase de grupos.

El equipo celeste no quiere dejar nada al azar. Es consciente de que necesita maracar y se propone solventar el trámite por el mayor número de goles posible.

El problema es que tendrá que hacerlo sin el concurso de su hombre-gol y futbolista más en forma, Iago Aspas, que ha sido sancionado por su expulsión en partido disputado en Balaídos frente al Standard y tendrá que conformarse con animar al Celta desde la grada. También causan baja, por lesión, Carles Planas y Claudio Beauvue, no así Nemanja Radoja, que cuenta desde ayer con el alta médica y estará disponible para el choque.

Como contrapartida a la baja de Aspas, Eduardo Berizzo podrá contar con Fabián Orellana, que reapareció el pasado domingo con buenas sensaciones después de un mes lesionado, y estará en el once inicial. También lo estará Hugo Mallo, que vuelve al lateral derecho después de dos partidos sancionado, y que compartirá con Jonny, éste por la izquierda, los flancos defensivos. En el eje de la línea, parece seguro Gustavo Cabral, indispensable para Berizzo, y probable Roncaglia, que cambiaría el costado izquierdo por el centro de la defensa.

En el medio campo, mientras tanto, los chilenos Marcelo Díaz y Pablo Hernández y el danés Daniel Wass se perfilan como titulares, pues con el alta tan reciente, parece improbable que el preparador céltico eche mano de partida de Radoja. En ataque, Rossi y Guidetti se disputan una plaza en el centro del frente de ataque, con ligera ventaja para el sueco; Orellana actuará seguramente por banda derecha y Bongonda (sin descartar la opción de Pione Sisto) por la izquierda.

Ya eliminado, el Panathinaikos quiere despedirse de Europa con victoria después ganar con el nuevo técnico, Marinos Ouzounidis, al Paok de Salónica en el último partido de la liga griega. El sustituto de Andrea Stramaccioni, despedido por malos resultados, ha anunciado que hará cambios para dar oportunidades a jugadores no habituales pero ha destacado la importancia que para él tiene ganar en Europa y ha advertido que su equipo buscará la victoria con todas sus fuerzas.