Normalmente, después de un fallecimiento, pocos son les que hablan mal de una persona. Pero en el caso de Filipe Machado, todas las personas encuestadas coinciden en señalar las mismas virtudes. Para Lupe Murillo, presidenta del Pontevedra, el brasileño "era un chaval con un comportamiento impecable". "Yo no coincidí con él y no lo conocía personalmente, pero la gente del club me habla maravillas de él. Llegó con 22 años, estaba empezando y, sin embargo, era un niño diez". Tras conocer su fallecimiento, el club publicó en sus redes sociales un mensaje de pésame con el que lamentaba "la pérdida del exgranate Filipe Machado".

Quien sí coincidió con él fue Nino Mirón, presidente del club en aquella etapa. El antiguo dirigente del club recordó que "era un gran chico, muy alegre y con ganas de comerse el mundo y triunfar". Mirón finalizó asegurando que "su fallecimiento es una pena tremenda".

Por su parte, Elías Espiñeira, director general de la entidad entre 2003 y 2008 sí mantenía contacto con el brasileño. "Le mandé un mensaje hace unos días felicitándole por el pase a la Final de la Copa Sudamericana y me contestó agradeciéndomelo", manifestó. Espiñeira recuerda a Filipe como "una persona excepcional y afable". "Fue uno de los jugadores que más huella me dejó", informó. "La del Pontevedra fue su primera experiencia seria y encajó muy bien. Era un chico con un enorme potencial que usaba el fútbol para conocer mundo. Iba casi a equipo por año. Le encantaba socializar", finalizó.