El Celta ha tomado esta noche tras el encuentro del Celta ante el Eibar en Ipurua una decisión sin precedentes en el seno del club vigués. La entidad celeste ha condenado en un comunicado oficial la actitud del árbitro Munuera Montero, al que acusa de faltar a la verdad en el acta que redactó al término del encuentro. Además, el Celta ha aprovechado para anunciar que recurrirá las dos tarjetas rojas que mostró el colegiado andaluz a Hugo Mallo y a Sergio Álvarez.

La polémica se originó en los minutos finales del encuentro y se prolongó hasta instantes después del pitido final, cuando Munuera Montero amonestó por protestar hasta a cinco miembros del plantel vigués. Guidetti, Rubén Blanco y Eduardo Berizzo vieron la amarilla, mientras que Sergio Álvarez primero, y Hugo Mallo después, recibieron la tarjeta roja.

Según el acta arbitral, Hugo Mallo le dijo al trencilla "eres un sinvengüenza" y añade que después el jugador de Marín se pasó por el vestuario arbitral para expresar sus disculpas. Esta historia es la que desmiente el Celta en su comunicado oficial. "Hugo Mallo no llamó en ningún momento sinvergüenza al colegiado y mucho menos le pidió disculpas por ese hecho, tal como refleja el acta redactada por el árbitro", reza el comunicado celeste, que reitera que no puede dejar pasar que "la actuación rbitral no se ajuste a la verdad".

El comunicado concluye con la afirmación de que "la actitud del árbitro principal no ha estado acorde con lo que el fútbol español exige" y recuerda que el club defiende los valores del respeto y del buen comportamiento y que al igual que se lo exigen a sus jugadores, también deben hacer lo mismo "con aquellos que integran este deporte".