El de ayer fue un partido bastante extraño para el Mecalia Guardés. En la primera parte la igualdad fue la tónica, que era lo que se prevía entre dos equipos que llegan relativamente cerca en la tabla (14 puntos el Mecalia; 11 las pucelanas). Pero en la segunda parte el conjunto del Aula Valladolid fue totalmente anulado por el buen juego de las guardesas.

Comenzó el partido totalmente diferente de cómo acabó. La igualdad fue la tónica durante muchos minutos. Las defensas estaban funcionando bien y costaba conseguir goles. A mediados de la primera parte un gol de Amalia consiguió incluso que el Aula Valladolid se pusiera por delante en el marcador, una diferencia que llegó a ser de dos tantos.

Cuando el partido parecía que se complicaba Haridian conseguía tres goles consecutivos y colocaba al Mecalia Guardés por delante en el marcador, lo que motivó que el entrenador del Aula Valladolid pidiera tiempo muerto. Esta decisión no consiguió parar el empuje del Mecalia Guardés y se fue al descanso con ventaja de dos goles. Con mejores sensaciones, pero todavía con la impresión de que habría que sufrir.

La consigna de Prades en el descanso surtió efecto en sus jugadoras y en tan solo cinco minutos de la segunda parte consiguieron romper definitivamente el partido con un parcial de 6-1. Desde ese momento hasta el final del partido ya solo hubo un equipo sobre la pista y ese fue el del Baixo Miño a pesar de los once goles conseguidos por la jugadora del Aula Valladolid Silvia Arderius. Este cambio en el partido fue en parte gracias al acierto goleador de Alesia Kurchankova, con cinco goles consecutivos y una Haridian impresionante en los seis metros. Con esta victoria el Mecalia Guardés se asegura la tercera plaza.

Ahora deben dejar a un lado la liga y centrarse en la doble jornada de la Cup Challenger contra el HC Dnepryan KaKherson. Los partidos serán el sábado y el domingo ambos a las siete de la tarde.