Sin tiempo para digerir el partido del sábado en Guijuelo, el Coruxo retoma la actividad con un partido importante ante el debutante Mutilvera. Un equipo situado en la decimoquinta posición, pero con tan solo dos puntos menos que los vigueses, de ahí la necesidad de lograr la victoria para abrir hueco.

El equipo entrenado por Rafa Sáez realizó en la mañana de ayer la última sesión de entrenamiento en las instalaciones de Fragoselo. La jornada comenzó con una sesión de vídeo en la que plantilla y cuerpo técnico analizaron diferentes aspectos de juego. Posteriormente, sobre el campo, los jugadores realizaron ejercicios físicos y trabajaron la estrategia para finalizar con un partidillo a medio campo.

Sáez no podrá contar con Gerardo Rubio ni con Mateo Míguez, que continúan lesionados. El técnico mantendrá hasta el último momento la duda de Quique Cubas, con molestias tras el partido de Guijuelo. Tras el entrenamiento, el técnico del Coruxo indicó que "el Mutilvera es un equipo que fuera de casa está haciendo buenas cosas y ha logrado resultados importantes. Nunca dan el partido por perdido y son muy combativos. Es un plus que este equipo maneja con excelencia y ese es su principal peligro.

"El equipo vino mal de Guijuelo por no lograr una victoria que estaba en el bote, pero esto sigue", admite Sáez sobre el 2-2.