Estradense y Arenteiro disputaron ayer un duelo entre rivales directos en la parte alta de la Preferente Sur. El choque dejó poco fútbol y mucho respeto por ambas partes. En ese planteamiento, la mayor intensidad y ritmo de juego del equipo ourensano le regaló las ocasiones más claras de gol, aunque no fue capaz de aprovecharlas. Los rojillos por su parte tuvieron sus opciones para llevarse los tres puntos en los ataques finales.

Ambos equipos realizaron una apuesta similar en el Municipal estradense. Presión, pocas concesiones con el balón en los pies e intentar generar peligro con sus habilidosos jugadores de banda. Los de Touriño encontraron en Pablo a su principal estilete, con un bonito duelo con Saúl que cayó casi siempre del lado del extremo rojillo. El Arenteiro, por su parte, voló a lomos de Rubén Arce, de cuyas botas salieron las mejores ocasiones.

Los de Carballiño vivieron sus mejores momentos en el inicio de partido. Su alto ritmo y principalmente sus claras ideas cuando tenían en balón hicieron daño a un Estradense que se encomendó una vez más a Coke. El meta rojillo desbarató la primera ocasión visitante, en un balón colgado al área que Maxi se encontró en el área pequeña. Su disparo a bocajarro lo detuvo Coke. Poco después, el portero volvió a ser clave al ganar en el mano a mano a Rubén Arce en una rápida contra. Con el paso de los minutos, los visitantes bajaron el ritmo y el Estradense comenzó a pisar el área rival, aunque sin generar grandes ocasiones. La más clara fue un remate cruzado de Jorge en un córner.

Este guión se repetiría en la segunda parte, con un Arenteiro mejor de inicio. Los visitantes tuvieron su ocasión más clara con un disparo franco de Dani Vázquez que su compañero Alberto detuvo tirado en el suelo. En el tramo final, el partido se igualó, con escasas ocasiones. Los rojillos terminaron sin embargo atacando con todo, dejando un claro remate de Javicho.