El Mecalia Guardés sigue en lo alto de la clasificación tras un comienzo inmaculado de temporada. El equipo del Baixo Miño salió del derbi de invictos que le enfrentaba al Porriño con una sonrisa dibujada en el rostro. Ganaron de forma justa, dominaron en un encuentro intenso marcado por las contundentes defensas y alcanzan la sexta victoria consecutiva. Solo el potente Bera Bera se mantiene junto a ellas con doce puntos.
Las de Prades mostraron tener más recursos, sobre todo en el lanzamiento exterior, ante las porriñesas que jamás le perdieron la cara al partido y se mantuvieron en el choque. Solo en el último tramo del partido el Guardés, con una fuerte defensa y las buenas paradas de Carratu, la diferencia en el marcador se agrandó de forma importante.
Las de Prades marcaron territorio rápido. Lo hicieron con el 2-0 inicial. Ya nunca estarían por debajo en el marcador y eso fue un interesante refuerzo para ellas ante un Porriño que aparcó sus dudas iniciales gracias a la conexión Cacheda-Sara Gil. La extremo fue la primera en dar un paso al frente por parte visitante y el partido se igualó mediado el primer tiempo. Las de Prades lograron su primera renta importante del partido (min.16, 9-5) y el preparador del Godoy Maceira se vio obligado a solicitar el primer tiempo muerto del encuentro e introducir cambios en el siete porriñés. La mexicana Selene Sifuentes en el lateral derecho y Andrea Dapena en el izquierdo acompañaron a Cacheda en la primera línea.
La defensa guardesa hizo imposible para el Porriño el juego con el pivote, pero el Porriño encontró algunas situaciones en siete metros para volver a acercarse en el marcador. Llegó a situarse 10-9, aunque el Mecalia Guardés siempre mostró recursos para sacar adelante los retos que le planteaban las de Abel Estévez. Llegaron los goles de Sempere (la principal artillera del partido con siete goles) y de Medel para dejar el partido en un 12-10 en el descanso.
Despegue
El partido siguió vivo durante los quince primeros minutos de la reanudación. Un choque dominado por las defensas, por la intensidad con la que se mostraron ambos equipos y también por las imprecisiones de ambos. 17-15 con un cuaro de hora por delante era un panorama inquietante. Pero siempre las de Prades consiguieron que el Porriño no volviese a igualarles en el marcador. Pero llegó entonces el mejor momento del lanzamiento del Guardés. Estela Doiro, una de las mejores del partido, Sempere o Kurchankova abrieron brecha en el marcador mientras en la zona de atrás la defensa 5-1 de las guardesas cerró al Porriño la posibilidad de soñar con una victoria. Por si fuera poco, Carratu estuvo inmensa en la portería y la ventaja fue creciendo hasta convertir los últimos minutos ya en un trámite.
El Mecalia Guardés acabó ganando el partido por 24-19 y mantiene el primer puesto de la clasificación con un pleno de victorias (seis triunfos en otros tantos partidos). Solo el Bera Bera se mantiene a su lado en la clasificación. El Godoy Maceira Porriño se queda con cinco triunfos, pero con la sensación de haber comprometido a un equipo tan potente como el de A Guarda. Siguen en lo alto de la clasificación.
El derbi volvió a ser una fiesta del balonmano femenino gallego. El pabellón se llenó con las dos aficiones, entregadas a sus equipos. Un verdadero lujo para el deporte gallego.
