El Atlético de Madrid, líder de la Liga y de su grupo de la Liga de Campeones, visita la fortaleza del Rostov ruso, invicto en sus últimos 26 partidos como local entre todas las competiciones, en una prueba de intensidad, fuerza y calidad para el sensacional momento del bloque rojiblanco.
Sin derrota en sus diez choques de esta temporada, al frente de la clasificación en las dos competiciones en las que ya ha entrado en juego, con un fútbol convincente y desbordante, el Atlético disfruta con un comienzo de curso imponente, con el que ya avista, incluso, el pase a los octavos de final del máximo torneo europeo.
Sus seis puntos, con sendos triunfos sin gol en contra frente al PSV (0-1) y el Bayern Múnich (1-0), representan un panorama ideal para el conjunto rojiblanco camino de Rusia, donde una victoria agrandaría a nueve su cuenta en el grupo D de la Liga de Campeones; media clasificación con tres jornadas aún por disputarse.
El Atlético es mucho más equipo que el Rostov. Es un duelo desequilibrado sobre el papel; el subcampeón de Europa contra un debutante, que ha resumido sus dos primeros choques con una goleada en contra en Múnich (5-0) y con un empate a dos con el PSV en su estadio, el lugar donde eleva su potencial el conjunto ruso.
El argentino Diego Simeone sólo incluirá un cambio en el once para Rusia: Fernando Torres por el francés Kevin Gameiro. El resto serán los mismos que remontaron y golearon de forma incontestable el pasado sábado al Granada (7-1).
