El submarino amarillo desdibujó en once minutos al Celta del último mes, al equipo que logró resarcirse de un mal inicio de temporada y que se situaba a las puertas de Europa. La intensidad y la verticalidad de los locales, sumados a un día para olvidar de los celestes, fueron las claves de un encuentro que se fue al descanso prácticamente sentenciado. El choque se puede resumir en ese primer cuarto de hora aciago para los de Berizzo. Dos tantos encajados -uno de ellos procedente de un error de Sergio- y amarilla para Sergi Gómez.

El Celta empezaba a vivir en una pesadilla que duraría hasta el pitido final. El cuadro celeste se hacía dominador del esférico, pero su posesión era infructuosa. El equipo vigués se mostraba cándido en ambas áreas ante un Villarreal que se replegaba para amar otra transición defensa ataque letal. El tercer tanto llegó precisamente en una contra. Bakambu, que volvía a la titularidad tras una lesión, batía a Sergio Álvarez y endosaba un nuevo golpe a las aspiraciones de remontada del cuadro celeste.

El conjunto vigués se resistía a bajar los brazos. Lo intentaba. Sergio Asenjo, al contrario que su homólogo al otro lado del terreno de juego, tenía un partido plácido. Solo Pione Sisto le creó trabajo. Antes de la reanudación conjura de los jugadores célticos. Quedaban 45 minutos para meter algo de presión, para buscar el milagro. Sin embargo, el segundo acto comenzó con un nuevo revés. Autogol de Wass. El empate quedaba lejos. Salir vivo de El Madrigal se convertía en una quimera. El Villarreal aflojó ese ritmo tan frenético de los primeros 45 minutos mientras que Berizzo daba minutos al joven Pape Cheikh y a Giuseppe Rossi.

El partido caminaba hacia su desenlace sin sobresaltos. No obstante, el Celta tendría que sufrir dos nuevos varapalos. Al filo del minuto 90 Sergi Gómez veía la segunda amarilla por una entrada en el centro del campo. La expulsión le impide jugar el domingo el derbi gallego, una baja sensible para un Eduardo Berizzo que tendrá que modificar su eje de la zaga. Ya en el descuento llegaría la ´puntilla´. Manu Trigueros aprovechaba un balón en el área celeste para firmar la ´manita´, una dura y contundente goleada para un Celta que firmó posiblemente su peor partido desde la llegada del preparador argentino al banquillo vigués.

Ficha técnica:

Villarreal: Sergi Asensjo; Mario, Víctor Ruiz, Álvaro, Jaume Costa; Bruno (Rodrigo, 81´), Manu Trigueros, Samu Castillejo, Soriano; Bakambu (Dos Santos, 63´) y Sansone (Pato, 72´).

Celta: Sergio; Hugo Mallo, Cabral, Sergi Gómez, Jonny; Radoja, Wass (Señé, 72´), Orellana; Pione Sisto (Pape Cheikh, 51´), Bongonda y Aspas (Rossi, 57´).

Goles: 1-0: Soriano (08´); 2-0: Soriano (11´); 3-0: Bakambu (37´); 4-0: Wass (propia puerta) (47´); 5-0: Manu Trigueros (90´).

Árbitro: Estrada Fernández (comité catalán). Mostró tarjeta amarilla a Álvaro por parte del Villarreal mientras que por parte del Celta vieron cartulina amarilla Wass, Orellana, Aspas y Pape Cheikh. Expulsó a Sergi Gómez (86´) por doble amarilla.