Alrededor de 48.000 cazadores gallegos dispondrán desde hoy de 2.641.340 hectáreas en el inicio de la temporada de caza menor. La campaña terminará el 6 de enero del próximo año. Conejos, perdices, zorros, becadas, liebres y belacinas, por ese orden, serán sus objetivos. La provincia de Lugo es la que tiene más TECOR (Terreno Cinegeticamente Ordenado), espacios que antes se llamaban cotos de caza. Pontevedra es la que menos posee. La actividad de la caza menor, regulada por un decreto del año 2013, se podrá realizar los jueves, domingos y festivos. De los 48.000 cazadores, casi 20.000 disponen de licencia federativa. El resto pertenece a las múltiples asociaciones repartidas por toda Galicia.

En este inicio de temporada la lluvia será otra de las grandes protagonistas, lo que puede condicionar, en cierta medida, el número de presas. Los primeros indicios indican que las perchas serán escasas, aunque en este primer día los cazadores se lanzarán al monte expectantes y con ilusión.

Javier Nogueira, presidente de la Federación Gallega de Caza, desvela que la cifra de cazadores es similar a la de años anteriores. Solo ligeras variaciones, algo que se puede considerar como normal. El dirigente destaca que "la caza es el segundo deporte que se practica en Galicia, tanto por número de cazadores como de sociedades. En el ochenta por ciento de los ayuntamientos de Galicia hay un espacio destinado a esta actividad. Y en muchos, incluso dos o tres". Javier Nogueira cuenta con una amplia experiencia en el mundo de la caza, en la que lleva más de veinte años, los últimos seis como presidente federativo.

La temporada de caza menor se presenta "muy intensa, como todos los años, y con una gran ilusión por parte de los cazadores. En los primeros días son los que se registra una gran actividad", apunta. La campaña de caza mayor, que se dedica a los jabalíes, corzos y venados, comenzó a finales del mes de agosto y terminará en los últimos días del mes de enero del próximo año.

Los datos muestran la importancia de la caza. Se dispone de 2.641.340 hectáreas en toda Galicia para poder realizarla. El Terreno Cinegéticamente Ordenado (TECOR) se distribuye por toda la comunidad. Hay 454 en total, repartidos en los 149 en la provincia de Lugo, los 124 en A Coruña, los 108 en Ourense y los 73 que se ubican en Pontevedra. A ellos se deben sumar 28 instalaciones autorizadas por las autoridades y que pertenecen a diversas sociedades. En cuanto al número de licencias federativas, A Coruña figura en el primer puesto. La provincia de Pontevedra cuenta con 11.000, una cifra nada despreciable.

Javier Nogueira desvela que "la edad mínima para poder practicar la caza en Galicia es de 16 años. La normativa en el resto de España es que los cazadores deben superar los 14 años de edad, es decir, dos menos". El dirigente también señala que "existen muchos clubes y sociedades en toda la Comunidad, lo que demuestra la importancia de la caza. Cada jornada de caza se mueven miles de personas". La implantación en Galicia es intensa, tal como reflejan los datos estadísticos. En el ochenta por ciento de los 313 ayuntamientos gallegos existe al menos un TECOR. Javier Nogueira explica que "pocos deportes pueden decir que en cada término municipal existe un espacio para ellos. Además, en algunos hay varios. La caza es un deporte importante, sin duda".

La federación autonómica tiene desde hoy una frenética actividad, según su dirigente. Pero a lo largo de la temporada se disputan diversos campeonatos gallegos de multitud de categorías y modalidades. Javier Nogueira desvela que "somos una de las federaciones que contamos con una mayor cantidad de actividades a lo largo del año. Es importante para nosotros y también para aquellos que sacan su licencia".

Los cazadores también disponen de otras zonas fuera de Galicia. Se calcula que un diez por ciento se desplazan a otras comunidades. Las preferencias son Castilla y León, Castilla-La Mancha y Extremadura, por ese orden. El método utilizado de manera habitual es el de formar grupos y elegir destinos que ya se conocen previamente. También importa, y mucho, la información sobre el estado de la zona a la que se quiere acudir.