Eduardo Berizzo no ocultó su alegría por la victoria lograda ante el Barcelona (4-3), la cual dijo que tiene "un significado muy grande" por la talla del rival.

"El ingreso de Iniesta le dio fútbol al Barcelona y nosotros también retrocedimos varios metros. Nos llevaron a nuestra mitad y ahí el Barça se transforma en el Barça. En la primera parte provocamos pérdidas con mucho peligro; en la segunda robamos muy atrás y el arco nos quedaba muy lejos. Pero el cuarto gol nos dio tranquilidad porque el resultado peligraba. Nos quedamos con una victoria que tiene un significado muy grande", indicó el rueda de prensa.

Berizzo destacó que su equipo le creó "mucho peligro" al rival con su fuerte presión y que en la segunda parte "el quite" les alejó del área rival: Hemos visto un partido hermoso, con dos equipos predispuestos a jugar al fútbol. En la segunda parte la posesión necesitaba una marcha menos".

"Tuvimos varias pérdidas pero más allá de eso me voy contento por la actuación del equipo. Encontramos un gran respaldo de cara al futuro", comentó el técnico celeste, para quien el triunfo es mérito de sus jugadores.

"Que yo gane es mérito de los futbolistas, el entrenador ayuda a los futbolistas a ganar. La posición de Wass era necesaria porque necesitábamos un jugador que presionara y robara balones. Nos decantamos por Daniel porque ha recuperado su nivel. Fue una de las grandes claves. El trabajo se solidificó en la gran actuación que él y Aspas tuvieron", apuntó.

Por último, valoró que su equipo siga manteniendo su identidad: "Jugamos de la manera que queremos jugar. Hoy entre el quiero y el puedo ha habido una gran cercanía. Contra el barca si no haces un partido perfecto, te ganan. Y nuestro primer tiempo fue perfecto, el segundo mas terrenal. Elogio a mis jugadores porque no se quedaron con el 2-3. Eso es un síntoma de lo que uno quiere como equipo"

Luis Enrique: "El cuarto gol nos mató"

Luis Enrique manifestó tras la derrota de su equipo que no puede marcharse contento de Balaídos por la actuación de sus jugadores en un partido en el que, a su juicio, el gol del chileno 'Tucu' Hernández, tras un clamoroso error de Ter Stegen, los mató.

"No puedo hacer una valoración muy positiva. Empezamos bien, metidos, sabiendo de la importancia para ponernos primeros. A partir del minuto quince perdimos duelos, se nos anticiparon siempre y perdimos muchas transiciones. Luego también hubo errores en el inicio del juego. Fuimos inferiores en el partido", comentó en rueda de prensa.

"Tratamos de cambiarlo -continuó el técnico asturiano- para meternos en el partido y lo conseguimos, pero el cuarto gol nos mató. Al final tuvimos ocasiones para empatar el choque pero no puedo irme contento de Vigo".

El exentrenador del Celta señaló que los jugadores son los "más fastidiados" por la derrota, y recordó que "las cosas no funcionan siempre como uno quiere". "Si hay un equipo que nos puede hacer daño es el Celta y si tengo que perder porque un equipo es superior a mí, que sea el Celta", subrayó Luis Enrique, quien aseguró no estar arrepentido por la alineación que sacó: "Soy entrenador y mi trabajo es tomar decisiones antes el partido. Después es muy fácil. Llevo muchos años haciéndolo y no me está yendo mal".

Preguntado por qué el equipo de Berizzo le crea tantos problemas, respondió que "hacen una defensa hombre contra hombre, corren muchísimo y no te generan situaciones fáciles", explicó el asturiano, quien no quiso valorar el error del portero alemán: "Tenemos una forma de jugar en la que el portero es decisivo. Después de ver el partido seguro que en esa jugada había soluciones más fáciles pero el primer culpable soy yo y así lo afrontamos".