Va soltándose en castellano John Guidetti, aunque de momento con frases cortas e infinitivos. Intenta enriquecer su vocabulario y así, pregunta cómo puede definirse ese escalofrío que recorrió su cuerpo cuando Balaídos coreó su nombre. "Ah, piel de gallina", repite.
"Hace diez años que el Celta no jugaba en Europa. Era el primer partido en Balaídos. Aficionados, espectaculares; equipo, espectacular y tres puntos", resume el sueco. "Me gusta jugar en casa, con estos aficionados. Muchas gracias por cantar mi nombre. Me ha encantado. Se me ha puesto piel de gallina. Todo fantástico. Llevamos tres victorias. Necesitamos continuar".
Elude polémicas respecto a su limitada participación en este arranque de temporada. "El mister es el jefe. Necesitaba una oportunidad y marcar gol, correr mucho, trabajar mucho....".
Guidetti no fija objetivos en Europa. Tampoco límites. "Tenemos que concentrarnos en cada partido. Yo no sé, con este equipo es posible ganarlo todo". Y sobre el inminente choque con el Barcelona, avisa: "Partido difícil, pero para los dos equipos. Jugar aquí es muy difícil para todos".
