El Villarreal se impuso con solvencia a Osasuna (3-1) en un partido marcado por la superioridad local hasta el descanso, que fue suficiente para que los puntos se quedaran en casa.

El equipo de Escribá jugó muy bien en la primera parte y se dejó ir en la segunda. Pato, Sansone y Castillejo desarbolaron a Osasuna, que lo intentó, pero sin pegada y sin inquietar de verdad a su rival.

A los cuatro minutos ya había recibido el primer gol, tras un buen centro de Castillejo que, libre de marca, cabeceó Pato al fondo de la red.

Un penalti claro sobre Roberto Soriano, que transformó Bruno puso el 2-0. Poco después, otra gran jugada de ataque por el centro acabó con el 3-0 marcado por Sansone, aunque Osasuna marcó antes del descanso en un penalti sobre Sergio León que transformó Roberto Torres.