Facundo Roncaglia es uno de los habituales en el equipo de Eduardo Berizzo. El argentino ocupó ayer el lateral derecho para que Hugo Mallo descansase del intenso arranque de temporada que llevaba el futbolista de Marín. Roncaglia se mostraba muy satisfecho ayer por el triunfo del Celta en el RCDE Stadium ante un Espanyol que le propuso un partido muy intenso, de ida y vuelta, y que se resolvió en el descuento a favor de los celestes.
"La victoria se debe al trabajo de equipo", comentó Roncaglia, quien agregó seguidamente que durante los noventa minutos más el descuento "nunca dejamos de pensar en la victoria y al final, por suerte, se dio".
Roncaglia analizaba la situación del Celta tras las dos victorias consecutivas -ante Sporting de Gijón y Espanyol-, pero lamentaba el mal arranque de Liga. "Hemos arrancado el campeonato de manera complicada", señaló, aunque quiso subrayar la importancia de los tres puntos de ayer: "Sumar de visitante siempres es importante". En su lectura del encuentro, el internacional argentino incluso aceptaba un empate como resultado final. "Un punto también hubiera sido bueno".
Este duelo era especial para Facundo Roncaglia, quien volvía a la que fue su casa en su anterior etapa en el fútbol español: "Siempre es muy bonito volver a la que fue tu casa. Dejé muchos amigos aquí", proclamó el defensa céltico.
Para finalizar su paso por la zona mixta del estadio del Espanyol, a Roncaglia se le preguntó por la semana intensa que espera al Celta, que el jueves recibe en Balaídos al Panathinaikos griego en competición europea. "Sabemos que el calendario de esta temporada es complicado. Ahora hay que pensar en el partido de la Europa League del jueves y luego ya pensaremos en el Barça", dijo en referencia al duelo que los célticos disputarán la noche del próximo domingo ante los azulgrana.
Roncaglia, como ya ocurrió el verano pasado en un amistoso en Florencia, se ha enfrentado a uno de sus exequipos como lateral derecho del Celta,
