El español Jorge Navarro (Estrella Galicia 0'0 Honda) regresó a la senda de la victoria al imponerse ayer en Aragón, aunque no pudo evitar que el surafricano Brad Binder (KTM) se proclamase matemáticamente campeón de mundo de Moto3.

Navarro supo aprovechar su oportunidad y vencer siete grandes premios después de su última victoria, en Cataluña, aunque uno de los principales puntos de atención estuvo centrado en saber si el surafricano Brad Binder sería capaz de proclamarse campeón del mundo cuatro grandes premios antes del final de la temporada y lo fue. Binder dio la cara en todo momento y peleó por la victoria para no dejar pasar ni una sola oportunidad y al final logró la recompensa que se mereció en todo momento, ser campeón del mundo.

La verificación técnica tras los entrenamientos de ayer detectó el uso de un cambio de marchas no homologado por partel del belga Livio Loi (Honda), que supuso la sanción inmediata relegándolo a la última plaza de la formación de salida.