Ocho minutos de acierto fueron suficientes para decantar la victoria a favor del Peluquería Friol en Matamá. El equipo vigués, que se fue al descanso con victoria por la mínima, encajó tres goles en ocho minutos en la segunda parte y aunque lo intentó hasta el final, no pudo remontar.

El Matamá afrontaba el choque con la satisfacción de los tres puntos conseguidos la semana pasada en Gijón y sabiendo que enfrente tenían un duro rival. Pero con su empuje y ganas lograron ponerse por delante en el marcador (1-0, Luca) y así llegaron al descanso con una ventaja mínima que les daba tranquilidad.

Pero a la vuelta de vestuarios todo cambió. Un par de errores en defensa y una buena acción del Friol supusieron tres goles en contra para las viguesas en sólo ocho minutos tras la reanudación. Y el partido cambió de color.

A pesar del fuerte golpe, el Matamá lo intentó todo y, con más corazón que cabeza, lograron dominar el choque y tuvieron varias oportunidades para acercarse en el marcador, pero no lo lograron hasta los instantes finales gracias a un gol de penalti. Después faltó tiempo para concretar la remontada, pero las viguesas dieron la cara hasta el final.