El Club Deportivo Moaña impuso su ley en O Casal y consiguió la primera victoria de la temporada a costa de un Polígono San Ciprián que continúa sin puntuar. El conjunto que dirige Pereira ha conseguido extender el idilio que mantenía la temporada pasada con su feudo -no perdió ni un solo partido- al arranque de esta campaña, sumando cuatro puntos en dos duelos como local. Ayer lo hizo en un partido irregular pero en el que mereció más que su rival.

El inicio de los moañeses fue intenso, con acciones por banda que descosían a la defensa visitante y generaban peligro. Apenas hubo que esperar tres minutos a que llegase la primera opción de gol, en una jugada de Róber que centró para que Jorge Fernández rematase y se encontrase con el pie de Outeiriño, que impidió un gol cantado. La primera media hora fue de completo dominio local y fruto del mismo llegó el gol de Yelco, al rematar de cabeza un saque de esquina.

Sin embargo, poco a poco el Moaña fue perdiendo fuelle ante un San Ciprián que optaba por el fútbol directo. La ansiedad por obtener el primer triunfo no ayudaba y el choque derivó en un juego intermitente. Aún así Jorge Fernández logró sentenciar al aprovechar un buen centro de Omar.