El Choco sigue sin poder brindar un triunfo en este inicio de campaña a su afición tras caer ante un Villalonga que sufrió mucho en la primera parte pero logró marcharse al descanso con el 0-0 en el marcador. Aprovechó su única llegada a la meta de Cortegoso y, paradójicamente, vivió mucho más cómodo los veinte últimos minutos de encuentro, cuando se quedó con sólo nueve jugadores por las expulsiones de Bisti y Adrián Santos.

El conjunto de Marcos Montes controló el encuentro prácticamente desde el pitido inicial ante un rival que intentaba también salir con el balón jugado desde atrás pero se atascaba ya en el inicio mostrándose incapaz de incomodar a los redondelanos.

Por el contrario, los locales, como ya ocurrió en el primer partido, volvieron a exhibir una preocupante falta de puntería. Cierto es que en las dos mejores oportunidades de la primera mitad sólo la mala fortuna evitó el gol del Choco.

Los visitantes no estaban cómodos sobre el campo y eso quedó claro en el descanso, con la entrada de Bisti por Mota para tratar de tener mayor presencia en el medio del campo.

El Villalonga, por su parte, no desperdició su único acercamiento a la meta rival con algo de intención. Fue un regalo de Alberto Suárez al perder una pelota en la salida que permitió a Iker Hurtado plantarse solo ante Cortegoso y superarlo por alto. Pese al golpe recibido, el conjunto de Marcos Montes seguía confiando en que al final la pelota acabaría entrando. Una idea que se afianzó aún más en la grada a veinte minutos del final, cuando Adrián Santos vio la roja, pero el sueño no se convirtió en realidad.