Nairo Quintana aseguró que "los ataques" que lanzó en la subida al Aubisque, final de la etapa reina de la carrera, fueron "fuertes y serios, pero no tan efectivos" como esperaba. Nairo, de todos modos, acabó "contento y satisfecho por haber dado todo lo que tenía" y reconoció que su principal rival, "Chris (Froome) está muy fuerte".

Quintana asumió que en la etapa de ayer le salieron dos importantes rivales de cara al futuro, su compatriota Esteban Chaves y el británico Simon Yates, que se han colocado tercero y cuarto en la general, en la que quedan a 2:01 y 2:17, respectivamente, después de recortar tiempo con sus ataques.

"Son dos jóvenes que amenazan indudablemente, pero se les ha dado libertad porque no estaban tan involucrados en la general. Pero de aquí en adelante no les podemos dar ni un segundo", comentó sobre los corredores del Orica.