El equipo cadete que participará en la Liga Gallega ha sido uno de los primeros que ha comenzado el trabajo de la pretemporada. En este curso futbolístico estará dirigido por Manuel Gómez, que se estrenará en el puesto de entrenador. El pasado sábado disputó en A Madroa un partido amistoso ante el Porriño Industrial, al que ganó con cierta comodidad. De todas formas, el resultado final fue anecdótico, ya que ambos técnicos utilizaron a muchos futbolistas. En el caso céltico, la plantilla estará compuesta en su mayor parte por los jugadores que fueron infantiles la temporada pasada y que lograron el título autonómico. Están previstas pocas incorporaciones.
La formación iniciará la competición con una gran exigencia, ya que el Celta es uno de los equipos que parten como favoritos para conseguir el trofeo de campeón. Tendrá como gran dificultad que la mayor parte de sus jugadores carecen de experiencia en la categoría. Un elemento que se puede considerar como importante y clave.
Los célticos intensificarán los entrenamientos a lo largo de la próxima semana con la intención de llegar en las mejores condiciones a la liga que se iniciará a mediados de septiembre. Mientras tanto, seguirán los encuentros amistosos. El próximo volverá a ser el sábado ante el Val Miñor.
También el segundo equipo juvenil ha comenzado su preparación. Con una renovación parcial en su plantilla, los célticos aspiran a ser los protagonistas en la temporada, al igual que en las anteriores. En estos primeros días destaca el gran esfuerzo que realizaron en los partidos amistosos. Estuvieron presentes en los torneos de A Coruña y Cambados. Fueron seis encuentros que se saldaron con cuatro victorias, un empate y también una derrota.
El cadete A y los dos equipos de infantiles también jugaron el pasado fin de semana, en todos los casos con buenos resultados. A lo largo de esta semana alternarán los entrenamientos con los partidos. Varias formaciones jugarán en A Madroa el próximo miércoles.
La mayor parte de las ligas se iniciarán en la primera semana del próximo mes. Los alevines y benjamines, que juegan en las competiciones locales, lo harán en la última semana de septiembre. Ese es uno de los motivos por los que su incorporación a los entrenamientos se ve retrasada, algo que suele ser habitual en todas las pretemporadas.
