El Alondras arranca la temporada con una victoria ante un recién ascendido, el Castro. Los hombres de Jacobo Montes, que realizaron un partido algo mediocre, debieron remontar el tanto inicial del conjunto visitante.

En los primeros compases se vió dominio alondrista, pero con un ritmo excesivamente lento. Aun así, por momentos conseguían combinar en zonas ofensivas, pero siempre les faltó último pase o remate para concluir las jugadas. El Castro, por su parte, se limitaba a acumular gente en su campo y esperar alguna contra o alguna acción a balón parado, dado que por corpulencia física, eran algo superiores a su rival. A pesar de no crear peligro, el Alondras, tenía el control del encuentro, pero en una jugada aislada el cuadro lucense lograba adelantarse en el marcador. Héctor remataba solo en el segundo palo un centro desde banda izquierda. El gol encajado desubicaría un poco al conjunto alondrista ante un Castro que se limitó a retrasar todavía más sus líneas, dejando sin apenas espacios a su contrincante.

Poco antes del descanso, el Alondras, en las botas de Víctor, haría trabajar al guardameta visitante con un disparo con algo de peligro. A poco de la reanudación, el entrenador local realizaría un doble cambio. Al minuto de entrar, uno de los sustitutos, igualaba la contienda. Joni, que tocaba su primer balón, batía por bajo a Vebra, al que la presencia de Andrés en la trayectoria del balón le despistaría lo necesario para no reaccionar a tiempo. Los morracenses cogieron aire con el tanto y comenzaron a apretar algo más a su oponente. Antes del gol de la victoria el Castro, en una perdida en la salida del balón, a punto estuvo de dar un susto con una vaselina de Iván que se iba cerca del palo izquierdo. Sin embargo el que golpearía instantes después, era Mauro, quien en velocidad ganaba la espalda de la zaga visitante y que tras ganar la línea de fondo culminaba una acción individual, lo que sería a la postre el gol de la victoria. Ya en la recta final, el Castro se quedaba con diez, por la expulsión por doble amarilla, en menos de un minuto de Iván. Sin más se llegaba a la conclusión con victoria alondrista por la mínima.