El piragüista tudense Óscar Carrera, miembro del equipo español de K4 1.000 metros , afirmó que tenía la expectativa de una medalla pero que no puede dejar de conmemorar lo que considera una hazaña para el piragüismo español. "Teníamos expectativas muy altas y cuando pasas por meta lo primero que piensas no es en el quinto puesto sino la medalla que se te ha pasado. Pero bueno, estamos contentos. Creo que con el paso de las horas y los días asimilaremos la buena hazaña que acabamos de hacer, que no es nada fácil conseguir y, bueno, a disfrutarlo", afirmó Carrera tras la regata.

El palista destacó que la disputa de cuartetos sobre 1.000 metros es la prueba reina del piragüismo y que colocarse entre los cinco primeros en una modalidad dominada por tan pocos países es un gran mérito. "Tenemos que festejar el quinto puesto y el diploma olímpico en una prueba tan difícil", afirmó.

Carrera dijo que el equipo español podía haber hecho historia y entrado entre los tres primeros si no se hubiera equivocado en la estrategia. Admitió que cuando el cuarteto llegó a la Lagoa Rodrigo de Freitas de Río de Janeiro había un viento en contra muy fuerte y decidió que, en lugar de desgastarse desde un comienzo, guardaría fuerzas para el final de la prueba. "Pero el viento amainó cuando comenzó la prueba y teníamos que haber partido con más fuerza desde un principio en lugar de sólo intentarlo al final. Son cosas que no puedes medir", dijo. Según Carrera, el equipo español había entrenado durante todo el año con la idea de entrar muy fuerte desde el principio para conseguir los puestos de medalla pero finalmente no usó esa estrategia.