El entrenador del filial del Real Valladolid, Rubén Albés, es otro de los nexos de unión del conjunto pucelano con el fútbol vigués. La temporada pasada abandonó el filial en la novena jornada para ser segundo entrenador en el primer equipo, y esta temporada vuelve al banquillo del filial.

El técnico cuenta con muchos problemas para confeccionar la convocatoria para el encuentro de esta tarde, ya que Deve y Corral están lesionados; Mario Gómez sancionado; y Miguel Mari sale de una lesión que le ha tenido en blanco toda la pretemporada y todavía no está en plenas condiciones para jugar. Además estará pendiente de la convocatoria de Paco Herrera, por lo que va a tener que echar mano del equipo juvenil.

Antes de partir hacia Vigo, Albés afirmó que "espero un partido realmente difícil, ya que el Coruxo, con Rafa Sáez, comienza muy bien las temporadas, creo que este año tienen todavía mejor plantilla que la temporada pasad. Nosotros hemos hecho un buen trabajo de pretemporada, pero esta semana llegamos un tanto mermados por el hecho de las dos bajas por lesión que tenemos, sancionados y la necesidades que en estos momentos tiene el primer equipo".