Las dos pruebas que remó ayer el K4 1.000 metros masculino de España fueron seguidas en los hogares de miles de cangueses, pues un vecino suyo, Rodrigo Germade, competía en los Juegos Olímpicos. Asimismo, el salón de plenos del Concello de Cangas acogió la proyección en pantalla gigante tanto de las eliminatorias como de las semifinales.

Pero sin duda los mayores nervios son los que pasaron los familiares y conocidos de Germade. Sus padres -José Manuel Germade y Josefa Barreiro- y su novia -Carlota Pampín- se desplazaron a Río de Janeiro, a donde llegaron este jueves.

Presenciaron las dos pruebas en primera línea. "En las series iniciales estuvimos más tranquilos, porque se clasificaban muchos, pero en las semifinales nos pusimos muy nerviosos", relata la pareja del cangués olímpico.

Y es que la salida algo más retrasada de la tripulación española tuvo que ser arreglada con un brillante último tramo para acabar en el primer puesto y amenazando incluso a los líderes.

"Creemos que se estaban probando de cara a la final de mañana -por hoy- por eso acabaron la semifinal con tanta fuerza", relata Carlota Pampín.

La familia de Germade se muestra optimista con respecto a las opciones de medalla de la delegación española en la final prevista para hoy a partir de las 15.00 horas.

Estarán presentes también ante las pistas deportivas habilitadas en la costa de Río de Janeiro con la intención de animar a Germade y sus compañeros y proporcionar ese último empujón que puede ser clave para subirse al podio.

Concello

El concejal de Deportes de Cangas, Xoán Chillón, anunció ayer que esta final será proyectada también en el salón de plenos, a partir de las 15.00 horas. La entrada estará abierta a todos los aficionados al piragüismo de la villa.