El mediapunta es la única pieza que falta en el puzzle táctico de Berizzo. Un fichaje que acabará por configurar una plantilla más amplia y rica en alternativas. La defensa es la línea que más ha engordado con este cambio de política: de seis opciones y más bien cinco para seis puestos a nueve. Y en el catálogo, David Costas, que a cuatro días del debut liguero y una docena para el cierre de mercado garantiza: "Mi postura es clara, quiero quedarme aquí y el 'mister' quiere que me quede. No contemplo una salida".

A Berizzo le ficharán el último jugador de campo que incluyó en sus peticiones. No será Praet, muy mencionado en los corrillos pero candidato secundario para el Celta. La prensa belga e italiana daban ayer por hecho su traspaso a la Sampdoria por diez millones de euros. El Anderletcht piensa como sustituto en el rumano Stanciu, del Steaua, al que también se ha vinculado a los celestes. "El mediapunta llegará", aseguran desde el club, sin concretar nombres.

No existe esa certeza respecto al portero. Al contrario, se impone la sensación de que pesará más la línea argumental que Mouriño marcó hace tiempo: con Sergio Álvarez, Rubén Blanco e Iván Villar, el Celta tiene su arco ocupado durante muchos años.

Será el único deseo que Berizzo no verá cumplido -con margen aún para la sorpresa-. Su deseo de multiplicar la competitividad dentro de la plantilla se ha visto colmado en otras demarcaciones, singularmente en la defensa. El Celta afrontó la pasada temporada con Fontás, Cabral, Sergi Gómez, Hugo Mallo, Jonny y Planas. En la práctica, Fontás se cayó de la ecuación por culpa de su lesión en el aquíleo. El Celta salió adelante gracias a la polivalencia de sus jugadores.

Esta temporada, en cambio, hay dos laterales por flanco: Mallo y Lemos para el derecho; Jonny y Planas para el izquierdo. Roncaglia, que también puede jugar arrimado a un costado, refuerza el eje defensivo, al que se reincorpora Fontás. En este escenario, a comienzos de verano parecía que el destino de David Costas pasaba una cesión, como la del año pasado al Mallorca. Pero el canterano no saldrá. Está hablado y sellado. "Yo soy uno más en el equipo. Ya dije a principio de pretemporada que me quería quedar aquí y me quiero quedar aquí este año", insiste Costas, con el refrendo de lo que conversado con Berizzo. "Hablé con él ya hace tiempo y los dos pensamos lo mismo, que lo mejor es que me quede este año. Me dijo que contaba conmigo, que este año iba a haber muchos partidos y tendría oportunidades. Y que tenía que aprovecharlas como uno más del equipo". Berizzo también le ha indicado que podría utilizarlo como lateral derecho.

"Yo sabía a principio de temporada que estaban buscando otro defensa. Llegaron dos. Somos muchos para muy pocos puestos. Pero confío en mí", analiza Costas, que volverá a Balaídos. Con Luis Enrique gozó de confianza. Con Berizzo apareció poco y no siempre con acierto. "Cuando haces las cosas bien y lo das todo por el equipo, la gente te ayuda. Está claro que tuve días malos en los que la gente no estuvo conmigo. Lo entiendo. A partir de ahora intentaremos cambiar esa idea que tienen y hacerles ver que pueden confiar en mí".