Una exhibición del japonés Kei Nishikori, cuarto favorito, dio al traste con las ilusiones olímpicas del español Albert Ramos en la sesión inaugural del torneo de tenis de Río 2016, que presenció el afán de supervivencia de Carla Suárez.
Nishikori levantó el telón en el Centro Olímpico de Tenis de Río con una declaración de intenciones. Albert Ramos, novato en unos Juegos, apenas inquietó al japonés, que en un cuarto de hora ya tenía una rotura de su lado. Mejoró el español, pero no lo suficiente (6-2 y 6-4).
Previamente Carla Suárez se había aferrado al torneo olímpico. Se salvó la española, que remontó ante Ana Ivanovic. La balcánica está lejos de lo que fue: número uno del mundo y campeona de Roland Garros en 2008. No aprovechó Ivanovic las dudas de la española, que tuvo un inicio desolador. La mejoría de Carla fue fulgurante (2-6, 6-4 y 6-2). Sumó así la española su segunda victoria en unos Juegos tras la que obtuvo en Londres ante la australiana Samantha Stosur. La española jugará en segunda ronda contra la croata Ana Konjuh. "Me he sentido muy nerviosa nada mas pisar la pista. Después me mostré positiva y mejoré", señaló Suárez.
Adiós tras siete Juegos
El torneo de dobles, que vio progresar a Ferrer y Bautista tras imponerse a los checos Lukas Rosol y Radek Stepanek (6-1 y 6-4), se despidió de la condición de olímpico del veterano indio Leander Paes, que oficializó, con derrota, su presencia en unos séptimos Juegos. El que fuera bronce individual en Atlanta 1996 cayó junto a su compañero Rohan Bopanna ante los polacos Lukasz Kubot y Marcin Matkowski por 6-4 y 7-6(6).
