Vicente del Bosque, seleccionador español, ofreció ayer la clave para poder superar a Italia: orden para no verse sorprendidos por sus salidas al contragolpe "y también talento". Por eso pidió a los suyos "ser nosotros mismos" para superar a un equipo "que domina la parte defensiva en su propio área, pero que también tiene mucho peligro adelante".

"Hemos tenido una fiabilidad grande, es cierto, pero sabemos que lo hecho con anterioridad no vale para cada partido nuevo. Lo más importante es que seamos nosotros, que juguemos como sabemos aunque vayamos a tener un cierto cuidado con ellos. Es un partido abierto, muy difícil, muy duro, muy exigente para los dos y vamos a ver quién gana. Ojalá podamos continuar en la Eurocopa y con aspiraciones de llegar hasta el final", valoró Del Bosque anoche en la rueda de prensa celebrada en el estadio de Francia tras el entrenamiento español.

"Vamos a estar un poco pendientes de su organización de juego, pero también nos gustaría intentar llevar la iniciativa", insistió sobre esa idea en varias ocasiones el seleccionador español, "con el debido respeto" a una selección "potente, muy fuerte, equiparable" a España para un partido con el "mismo porcentaje" de opciones para cada uno.

"No hay grandes diferencias, a priori. Luego, el terreno de juego dictará quién es mejor. Ellos tienen una forma de juego muy singular, especial, que la llevan con toda la efectividad y no podemos obviar eso, porque es un asunto transcendente. Debemos tener cuidado y orden, pero también el talento para superarlos", remarcó.

"Sabemos que nos vamos a enfrentar a un equipo muy sólido, que domina la parte defensiva en su propio área, pero que también tiene mucho peligro adelante. Domina las dos áreas y vamos a tratar de que todo el equipo hagamos las cosas bien para contrarrestar su juego y al mismo tiempo hacerlos daño", explicó Del Bosque, consciente de que enfrente se encontrará un equipo con tres centrales, un sistema que crea problemas en los últimos tiempos a la selección española. "Hemos dado los toques necesarios para que todo el mundo esté atento y sepa lo que tiene que hacer", repasó el seleccionador.

"En el último enfrentamiento en Udine (1-1 en un amistoso el pasado mes de marzo) ya jugaron así. Siempre hemos tenido algunos problemas de acoplamiento contra sistemas parecidos, pero espero que mañana estemos a nuestra altura y que no solo nos preocupemos de ellos, sino que ellos se preocupen de nosotros", añadió.

En la final de la Eurocopa 2012, España se impuso a Italia por 4-0, el resultado más amplio habido en una final del torneo continental. "El partido tuvo también unos condicionantes importantes, sobre todo en relación a Italia, que llegó un poco mermada en su potencial físico. Tuvieron varias lesiones, tuvieron un partido accidentado y no fueron la Italia verdadera, la Italia de ahora mismo", avisó.

Del Bosque también destacó la evolución de Álvaro Morata en las dos últimas temporadas en el Juventus: "No sé si todavía, pero ha estado en una etapa de formación que le ha venido muy bien. Se ha curtido y está muy bien. Tiene que alcanzar esa regularidad que deben tener los grandes jugadores; sólo eso, detalles".

"Lo que aporta a nuestro equipo es importante. Tiene que ganar en regularidad. Confiamos mucho en él y esta etapa que ha pasado ha sido muy buena para su formación", continuó el seleccionador, preguntado por Portugal, ganadora ante Croacia y el rival que le hubiera tocado a España si hubiera terminado como primera de grupo.

"A priori, antes de los partidos todos los comentarios son válidos. Son opiniones, nada más. Pero luego la realidad es otra. Sabemos cómo está de equilibrado el fútbol. Salvo Alemania, que ha ganado con cierta autoridad, los demás estamos viendo que todos los resultados son muy escasos y hay pocas diferencias", dijo Del Bosque, quien también fue cuestionado sobre su futuro, ya que en principio su contrato finaliza a la conclusión de la Eurocopa.

"No tengo ningún pensamiento sobre el futuro, solo el de intentar hacerlo lo mejor posible en la Eurocopa. Cuando veníamos hacia el estadio para entrenar venía pensando que en septiembre empezamos la clasificación para el Mundial de 2018. Pase lo que pase aquí empieza una nueva etapa, así es el fútbol y la vida; conmigo o sin mí", concluyó Del Bosque.