Lalín fue ayer la capital gallega del celtismo gracias a la celebración de la II Romaría Celtista, organizada por la peña Siareiros Dezaos en colaboración con FARO DE VIGO. El evento dio comienzo en torno al mediodía con una recepción oficial en el Concello de Lalín a buena parte del millar de peñistas participantes, que estuvieron acompañados por Claudio Beauvue, futbolista francés del equipo que dirige Eduardo Berizzo, y del director de la Fundación Celta de Vigo, Germán Arteta. El alcalde de Lalín, Rafael Cuiña, fue el encargado de dar la bienvenida a todos los participantes haciendo gala de un celtismo que heredó de su padre. Los peñistas realizaron un recorrido por las dependencias de la casa consistorial para acto seguido dirigirse al Campo da Feira, centro neurálgico del evento, para participar en una sesión vermú que estuvo amenizada por A Banda da Tasca.
En torno a las 14.30 horas dio comienzo una concurrida comida de confraternidad, que contó con la presencia del grupo de gaitas Bico da Balouta, encargado de amenizar un ágape que se prolongó hasta bien entrada la tarde. A las 18.00 horas, los organizadores de la reunión de peñistas del Real Club Celta pusieron en marcha una serie de actos de animación musical e infantil para los numerosos pequeños que acudieron en compañía de sus familias al evento. Como viene siendo habitual desde la primera edición de la Romaría Celtista, se hicieron entrega de numerosos obsequios entre los presentes. FARO DE VIGO obsequió a varios de ellos con recuerdos conmemorativos del equipo vigués, que fueron muy bien recibidos por todos los destinatarios en un acto que precedió al concierto con el que se cerró la celebración.
Ska, punk y rock
La guinda la pastel celtista de ayer en Lalín la pusieron los cuatro conjuntos de ska, punk y rock que formaron el cartel de la Romaría Rock con la que concluyó la reunión de los aficionados. El punk de los locales de la parroquia de Donramiro, Última Sacudida y Tiro Na Testa, el ska y el reggae de los Dakidarría, y el street rock and roll de los vigueses Keltoi hicieron las delicias de los más jóvenes hasta bien entrada la madrugada. Los sonidos más eléctricos pusieron el broche de oro a una jornada que terminó con todos los celtistas presentes en Lalín citándose para la tercera edición de la romería que tendrá lugar el año que viene en la localidad coruñesa de Muros.
