Robert Lewandowski es la referencia y principal reclamo, pero a su lado crece una generación de futbolistas con la firme intención de que Polonia deje de ser una de las cenicientas y logre dar un paso al frente en un torneo de entidad. Tras el fracaso del último Europeo, en el que era una de las anfitrionas y solo hizo dos puntos en la primera fase, ahora busca un mayor crecimiento sin la presión añadida de jugar ante su gente. La oportunidad de lograr pasar de la primera ronda, la última vez ocurrió hace 30 años, se presenta generosa con el nuevo formato (habrá grupos en los que pasen tres equipos) y con Irlanda del Norte y Ucrania como rivales directos ante su objetivo. Además del delantero del Bayern habrá que estar atentos a Blaszczykowski (Fiorentina), Piszczek (Dortmund) y Krychowiak (Sevilla).