Carlos Mouriño Carlos Mouriñoafirmaba desconocer días atrás el importe económico que el club destinará a nuevos fichajes, no más de cinco si se mantiene la misma plantilla del curso pasado. Ese número de incorporaciones en verano ha sido la media del Celta en los cuatro últimos años, desde que retornó a Primera División. Sin embargo, ha multiplicado por tres la inversión en este capítulo. En el verano de 2012, el Celta gastó alrededor de 3 millones de euros en la contratación de Augusto Fernández, Krohn-Dehli y Samuel Llorca. Un año después, esa cifra rondó los cinco millones, pues llegaron a Vigo jugadores como Fontás, Nolito y Charles. Descendió la cuantía en el verano de 2014, cuando el Celta fichó a Larrivey, Radoja y Hernández. La mayor inversión por el momento se realizó hace un año, cuando el club desembolsó unos 11 millones de euros para la incorporación de Aspas, Wass, Guidetti y Drazic.

Aunque el presidente céltico no ha querido desvelar las cifras económicas que dedicará a fichajes, puede darse por seguro que superará a la correspondiente al verano pasado, pues el club recibirá un incremento importante en los ingresos por los derechos de televisión (alrededor de 49 millones de euros le garantiza la LFP) y el presupuesto general de la entidad casi se doblará, pues se espera reservar una partida de 63 millones de euros para afrontar la temporada que viene.

Estas previsiones de gastos en fichajes no contemplan traspasos de piezas importantes, como podría ser Nolito. Si se produjese su marcha, el dinero que el Celta dedicaría a nuevas contrataciones se dispararía.