El Olivo recibe hoy en el Pahíño de Navia al Seagull de Badalona en el partido de vuelta de la primera eliminatoria de la fase de ascenso a Primera División femenina con la misión de remontar el 1-0 cosechado en el encuentro de ida.

Un resultado que deja la eliminatoria muy abierta y que hace albergar esperanzas al cuadro vigués de conseguir alcanzar la siguiente ronda en el encuentro de hoy, en el que jugará arropado por su incondicional afición. "El primer gol lo tiene que marcar la grada". Es el mensaje que han ido dejando durante la semana tanto el cuerpo técnico como la directiva, que tienen fe ciega en las posibilidades de la escuadra de David Ferreiro.

En la ida, El Olivo llegó a estrellar dos balones al palo, el último de Joana, que hubiera dejado las cosas más fáciles para el conjunto olívico. Pero la experiencia será un punto a su favor. Será la sexta fase de ascenso para el equipo de Navia, la segunda consecutiva para su entrenador.

El Seagull se mostró en Badalona como un equipo rocoso, con jugadoras de una gran presencia física. Pese a todo, David Ferreiro no está dispuesto a renunciar a su estilo porque sabe que si sus jugadoras saben emplear bien sus armas son capaces de llevar a cabo su misión.

Con una trayectoria casi perfecta durante toda la temporada (la única derrota cosechada fue en la última jornada ante el Sárdoma) en la que certificaron su presencia en la fase ascenso a falta de cinco jornadas para terminar el curso, El Olivo se ha preparado a conciencia para esta nueva oportunidad de intentar dar el salto a Primera División.

La única ausencia para David Ferreiro hoy será la de Mónica, que ya lleva tiempo lesionada. Las demás están todas disponibles y dispuestas a dar un paso más hacia Primera. De superar esta ronda, las viguesas aún tendrían que superar una segunda ronda, en la que se medirían o al Madrid CFF o al Tacuense. Ambos equipos empataron a un gol en el encuentro de ida de esta primera eliminatoria.