"Amo el fútbol, me encanta y tengo la suerte de vivir de él". Así se define Felipe Miñambres, un astorgano que se ha dedicado por completo al deporte rey en los últimos treinta y seis años, desde que a los quince firmó por el club de la localidad leonesa donde nació: el Atlético Astorga. De ahí pasó al Zamora antes de integrarse en la cantera del Sporting de Gijón, donde coincidió con Alejandro Menéndez, con quien ahora se reencuentra en Vigo. "Jugó conmigo en el Sporting B. Seguirá como entrenador del Celta B. Hace mucho tiempo que no lo veo, desde que estaba en el Castilla", apuntó ayer sobre Menéndez.

Miñambres, un centrocampista con clase y recorrido, dio el salto al primer equipo gijonés en la temporada 1988-89. Al finalizar ese curso, se convirtió en el primer futbolista español en abonar la cláusula de rescisión de su contrato para fichar por el Tenerife. Allí vivió una etapa de éxitos en Primera División, incluida una semifinal de la Copa de la UEFA. Además, Clemente lo llevó al Mundial de Estados Unidos, donde coincidió con el excéltico Jorge Otero. En la isla canaria permaneció trece años. Se considera hijo adoptivo de Tenerife, de la que se marchó porque sus principios futbolísticos eran incompatibles con Javier Clemente, a quien el presidente del club tinerfeño había contrato a pesar de la oposición de su director deportivo, cargo que había asumido Miñambres tras una breve experiencia como técnico. Durante su despedida en Vallecas recordaba: "No me mueve el dinero ni la categoría [de un equipo]".

Salió de Canarias con su familia para hacerse cargo del banquillo del Hércules. Y de ahí, al Salamanca, al Alicante y al Lleida, para convertirse en director deportivo del Rayo Vallecano en 2007. En el club madrileño también tuvo que ejercer de entrenador en momentos puntuales, pero Miñambres destacó por su facilidad para construir plantillas "low cost", sin dinero, con futbolistas libres de contrato o cedidos. "Creo que aquí habrá algo de dinero para fichar", apuntaba ayer.

Y para trabajar en Vallecas contó con la colaboración de Ángel Medina (Madrid, 1967), exfutbolista del Castilla y el Salamanca que le ha seguido al Celta. "Era mi secretario técnico en el Rayo y lo llevé del Salamanca hace unos cuantos años", explica Miñambres.

El nuevo director deportivo del Celta maneja buenas referencias de Berizzo: "Anoche estuve hablando con él. Lo conozco de cuando era jugador. También coincidí alguna vez con él en Chile, cuando trabajando para el Rayo estaba siguiendo a un jugador chileno. Y lo conozco de su trayectoria en España como entrenador. Desde fuera me ha causado una buena impresión, en todos los aspectos, como persona y como profesional". Berizzo solo quiso renovar por un año con el Celta. Miñambres se ha comprometido hasta junio de 2018.