El Choco afronta esta tarde el mayor reto de su historia. Los de Redondela defienden en el Nuevo Vivero de Bajadoz el 2-1 conseguido hace una semana en el campo de Santa Mariña. El premio: estar por primera vez en la segunda eliminatoria de la fase de ascenso a Segunda División B, dejar en la cuneta a un histórico como el cuadro pacense y vivir otras dos semanas extraordinarias.

Le espera una tarde dura a los de Marcos Montes. El partido de hace una semana en Redondela les reafirmó en su idea de fútbol y les dio argumentos sobre su capacidad para comprometer al Badajoz. Pero el cuento de esta tarde será diferente y el Choco deberá demostrar otro tipo de cualidades. Se espera un Badajoz desbocado en busca de ese gol que necesitan para voltear la eliminatoria. Amparado por el público, que se espera llene el Nuevo Vivero, meterán ritmo al partido y tratarán de sacar partido de las jugadas a balón parado en las que son un equipo de enorme potencial. Ese es precisamente uno de los grandes temores del Choco que se sabe inferior en esta faceta de juego (aunque curiosamente hace una semana su segundo gol llegó en un saque de esquina). Marcos Montes ha recordado esta semana que deberán extremar las precauciones en ese sentido y luego intentar aprovechar las debilidades que el Badajoz ya ofreció en la ida y que tienen mucho que ver con las dificultades que encuentran para hacer la transición defensiva. En Redondela sufrieron a la hora de correr hacia atrás y el Choco confía en aprovecharse de esta circunstancia para marcar un gol que les allane el camino hacia el sorteo que se celebraría mañana en la sede de la Federación Española en Las Rozas.

Montes llega a la cita con el equipo intacto. Un pisotón a Hugo Sanmartín en un entrenamiento de mitad de semana fue la única incidencia que han vivido en los últimos días. El técnico dispone de todo su arsenal y la alinación será casi idéntica a la que opuso hace una semana. En el Badajoz sí hay alguna novedad más. El técnico, Agustín Izquierdo, ha recuperado para la cita a Jairo y Javichu que no pudieron estar en la ida, pero a cambio pierde a Parada que sufrió un traumatismo hepático al recibir en Redondela un rodillazo en un costado. No se ha recuperado y es una baja sensible para el conjunto extremeño porque es uno de sus referentes en el centro del campo.

En Badajoz existe una importante presión en torno al partido. El equipo pacense tiene el ascenso como obligación. El Choco sabe que su exigencia es otra, que ellos no tienen ese punto de presión. Esperan aprovecharlo en un día que les medirá en muchos sentidos. Nunca se han enfrentado a una situación como la de esta tarde.