El alero estrella LeBron James vio cumplido su deseo de comienzo de temporada de volver a estar con los Cavaliers de Cleveland en las Finales de la NBA por segunda vez consecutiva y lo hizo tras eliminar a los Raptors de Toronto (4-2) en la serie al mejor de siete.

La victoria decisiva llegó en el sexto partido que los Cavaliers ganaron a domicilio 87-113 después que James dio toda una exhibición de juego completo al aportar un doble-doble de 33 puntos, 11 rebotes, seis asistencias y tres tapones, en 41 minutos de acción.

Nadie dentro de la defensa de los Raptors pudieron controlar su poder físico, inspiración encestadora y ansias de tener de nuevo la oportunidad de luchar con los Cavaliers el deseado título que todavía no ha podido alcanzar y es su verdadera asignatura pendiente, por la que dejó todo en Miami y volvió a Cleveland.

La victoria puso a los Cavaliers en las Finales de la NBA por tercera vez en su historia y sus rivales en la Conferencia Oeste será el equipo ganador de las finales que disputan los Warriors de Golden State, actuales campeones defensores, y los Thunder de Oklahoma City, con ventaja de estos últimos por 3-2.

El año pasado los Cavaliers, con James en su primer año de regreso a Cleveland, perdieron las finales ante los Warriors (2-4) y en las primeras en la carreras del alero estrella, los Spurs de San Antonio los barrieron (4-0).

James jugará las séptimas Finales de la NBA y las sextas consecutivas, incluidas cuatro con los Heat, con quienes consiguió dos títulos. El alero estrella de los Cavaliers superó por primera vez la barrera de los 30 puntos en lo que va de competición de los playoffs.