El centrocampista del Málaga Ignacio Camacho afirmó ayer que quiere "lo mejor" para su equipo y que, en este objetivo, espera que él y el club vayan "de la mano".

Camacho fue preguntado por su futuro en conferencia de prensa y, pese a que le restan tres años de contrato en Málaga, señaló que "en el momento que sepa algo y tenga algo sobre la mesa", será "el primero en decirlo", aunque confesó que este asunto le cansa "porque todos los veranos son iguales".

"Si hay una salida o viene algo, si llega el momento se hablará", afirmó el centrocampista, quien precisó que si no hay ofertas, está "muy contento" en el conjunto malaguista.

Camacho alabó al equipo blanquiazul porque "año tras año" se ha sobrepuesto a ventas de jugadores, ha sabido adaptarse y jugar "de forma diferente" y, de esa manera, le ha "hecho pasar dificultades a grandes equipos de la Liga española".

Aseveró que el esfuerzo del Málaga "nunca ha sido negociable" porque, según mantuvo, sabían que después de conseguir la permanencia tenían "más cosas hasta que se complicó lo de Europa" y había "mucho que perder y poco que ganar".

Camacho indicó que los malaguistas han sido valorados "muy injustamente", que no tiene "nada que reprochar al equipo" y que el partido contra el Celta lo afrontan con el objetivo de ser octavos, para que se constate su profesionalidad una vez que ya no tiene opciones europeas.