Excelente tarde de fútbol la que brindaron en A Senra el Choco y el Ribadumia. Un partido jugado de poder a poder en el que la presencia en las áreas fue una constante y en el que, en méritos futbolísticos, nadie quedó derrotado pese a la dictadura del marcador definitivo.
Prácticamente desde la primera combinación de pases se observó la mentalidad ofensiva de ambos equipos. El Ribadumia protagonizó el primer acercamiento con serias intenciones. Llegó tras una buena combinación por banda izquierda que terminó en un centro al área de Jorge Fajardo que Molinos peinó lo justo para que no llegase a un Changui que ya tenía la caña preparada.
Los avisos en ambas áreas no hicieron más que aumentar la intensidad de las vigilancias y el partido derivó la batalla hacia la zona medular. Fue entonces cuando el juego entró en una fase más tediosa que solo dejaba lugar a la ofensiva de manera muy intermitente. En una de esas apariciones nuevamente un activo Jorge Fajardo sirvió un muy buen centro desde la izquierda que se paseó por el área sin encontrar un rematador.
Lejos de decaer, la segunda parte en convirtió en otra oda al fútbol valiente. A ese que no negocia la posibilidad de irse a por la portería rival a la menor ocasión. El Ribadumia le mostró los colmillos en todo momento al Choco llegando a hacer dudar de qué equipo va a jugar el play-off de ascenso y cual se tendrá que conformar con la permanencia.
La calidad en portería de Cortegoso fue determinante en la segunda parte. Primero al parar un mano a mano de Fran Matos tras un pase magistral de Changui. Y poco después al rechazar un disparo del propio Changui con todo a favor desde el punto de penalty tras un excelente pase de Fajardo.
El partido había entrado en combustión.Gabi también pisó el área con peligro pero no acertó a conectar el remate en una situación franca de gol. El gol apareció tras un pase filtrado de Félix a Fer que disparó muy duro desde la frontal sin oposición. Manu Táboas pudo desviar el balón a su palo izquierdo, pero al rechace llegó Óscar, que marcó.
