Martín no va a estar solo en su primera experiencia con la camiseta de la selección nacional. La semana que viene, sus padres, hermano y abuelos, iniciarán uno de los viajes más emocionantes de sus vidas, pues no es habitual poder ver el debut de un hijo, hermano, nieto, con la selección nacional, aunque sea en categorías inferiores. Aki reconocía que "vamos a estar todo el tiempo limpiándonos la baba", mientras que María, su madre, estaba "por llevar unos pompones para estar animando todo el tiempo". Los que tampoco se quedan atrás son los abuelos, que siguiendo con la tradición baloncestística de la familia, han decidido hacer unos "ligeros" cambios en su domicilio, para que los nietos encuentren mejores condiciones para practicar su afición.