En la recepción oficial a los equipos participantes en la Copa de la Reina en el Concello de O Porriño se encontraba una 'madrina' de excepción, la olímpica Begoña Fernández (que ganó la medalla de bronce con las Guerreras en los Juegos de Londres).
Después de vivir innumerables torneos de Copa de la Reina como jugadora, en esta ocasión le toca vivir este campeonato de una manera diferente, desde la otra parte de la barrera. Ya retirada y en la recta final de su embarazo, la porriñesa se confiesa "muy orgullosa" de que la Copa se dispute en su tierra. "Para mí es un orgullo que se celebre aquí porque es una suerte tener la oportunidad de disfrutar de una Copa de la Reina aquí, de una forma diferente, eso sí, porque hasta ahora siempre lo había disfrutado como jugadora y ésta es otra forma de sentirla, de vivirla, desde la otra parte de la barrera, pero estoy muy contenta y me siento muy orgullosa de que sea en Galicia y muy orgullosa de que haya dos equipos gallegos participando en ella. Así que estoy deseando que empiece ya", indicaba ayer tras la recepción en el Concello presidida para alcaldesa Eva García de la Torre, y en la que también estuvieron presentes el presidente de la Federación Gallega de balonmano, José Luis Pérez Ouro, y el de la Española, Francisco V. Bláquez.
"Creo que la de O Porriño es una Copa distinta. Incluye eventos que no se habían hecho hasta ahora como la Minicopa, con los equipos de base cadetes, y eso es una aportación muy bonita para esta competición, sobre todo para que los equipos de la base también disfruten de alguna forma de ella", explica. "También me parece genial que se les de la oportunidad a los clubes de que, aunque pierdan, puedan seguir aquí en O Porriño disfrutando del torneo. Es un detalle bastante bonito y creo que son las pinceladas que hacen de ésta una Copa diferente", subraya la medallista olímpica.
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Begoña Fernández recalca una y otra vez el orgullo que siente por su tierra. "Me siento muy orgullosa de ser gallega siempre, pero en estos momentos casi que más por todo el apoyo de las instituciones, del Club Balonmano Porriño, de la Federación, por toda esa gente que ha puesto su granito de arena para que esto se haya podido llevar a cabo. Que hagan una apuesta tan fuerte por el deporte femenino y, sobre todo por el balonmano, es para sentirse muy orgullosos".
En lo deportivo Begoña Fernández se muestra encantada con la posibilidad de que los dos equipos gallegos alcancen la fina. "Me encantaría vivir una final gallega. La Copa es una competición corta y puede pasar de todo. No me gusta hablar de favoritos en este caso porque te lo juegas todo a un partido y es lo que la hace diferente, bonita y tan especial", apunta.
De todos modos, para la porriñesa, "lo importante es que disfruten, que estén tranquilos, que disfruten de este torneo. Que lo hagan lo mejor que saben y luego ya todo irá surgiendo", dice la jugadora, que hoy estará en la grada para animar al Mecalia Guardés por la mañana y al Porriño por la tarde.
Begoña Fernández está "muy feliz" también por la clasificación olímpica de la selección femenina, con la que trabaja en calidad de embajadora. "Estoy en un momento muy bonito porque aunque es una forma distinta de disfrutar del balonmano la verdad es que me están dando la oportunidad de disfrutarlo desde el otro lado y es una experiencia muy gratificante". Su próxima maternidad le impedirá, sin embargo, acompañarlas en Río. "Desde casa estaremos animando a tope", bromea.
"Me da mucha pena por los chicos. Me puse muy triste porque creo que es un poco injusto que una selección como la nuestra masculina, con la trayectoria que llevan, que tengan que jugar un Preolímpico y que luego, además, se queden fuera de los Juegos, pero bueno, el deporte es así y es lo que hay".
