En la plantilla del Celta han comenzado a manejar cifras de cuántos puntos necesitarán sumar en las últimas siete jornadas de Liga para concluir en la quinta o en la sexta posición. De conseguir ese objetivo, el equipo vigués retornaría la temporada que viene a las competiciones europeas casi una década después de su última participación en un torneo continental. Para conseguirlo, los de Eduardo Berizzo solamente necesitan repetir los cierres de campaña de los tres últimos años, en los que sumaron entre 12 y 13 puntos de los 21 que estaban en juego. Ahora mismo son quintos, con 49 puntos. Si alcanzan los 60 tendrán asegurado el acceso directo a la Europa League.

Las ilusiones del Celta se fundamentan en que no ha bajado de la séptima plaza en lo que va de curso y en las excelentes fases de clausura que ha realizado desde que hace tres años regresó a Primera División. Iago Aspas mostró ayer sus cuentas en la sala de prensa de A Madroa. "Para quedar quintos o sextos tenemos que conseguir entre 11 y 12 puntos porque hay enfrentamientos directos", apunta el delantero de Moaña en referencia a que el Athletic de Bilbao ha de jugar con el Sevilla, ambos situados en sexto y séptimo lugar, respectivamente, empatados a 48 puntos. Además, los bilbaínos recibirán al Celta en San Mamés en la antepenúltima jornada. "Con 60 puntos podríamos quedar quintos o sextos", reitera Aspas.

El Celta se muestra capacitado para alcanzar la meta de los 60 puntos. Ahora mismo son 11 los puntos que le separan de ese objetivo. Para ello solamente necesita comportarse como en las últimas jornadas de las tres pasadas temporadas. Aspas se muestra confiado. "Esperamos finalizar lo mejor posible. Para nosotros, acabar en la quinta o en la sexta posición es una ilusión. Al principio de temporada lo hubiera firmado cualquiera con los ojos cerrados".

El futbolista morracense recuerda que el Celta ha protagonizado tres finales de temporada muy buenos desde que consiguió su último ascenso a la máxima categoría. Eso les sirvió, por ejemplo, para salvarse "del descenso", recorda Aspas. En esa ocasión, el equipo vigués afrontó las últimas siete jornadas de Liga desde la última plaza y con 24 puntos. Su recta final de curso fue espectacular -sumó 13 puntos- y salvó la categoría en el último minuto, con 37 puntos.

Al año siguiente, el Celta de Luis Enrique Martínez se asentó en la categoría y afrontó la fase decisiva del campeonato sin agobios. Aún así, también aceleró para remontar dos puestos en la clasificación general. Acabó noveno, con 49 puntos, después de conseguir cuatro victorias y un empate en los siete últimos encuentros.

Doce puntos sumó el año pasado con Berizzo en el mismo tramo de la competición. El conjunto vigués partía del décimo puesto y ascendió hasta el octavo gracias a los 51 puntos con que despidió el curso tras imponerse al Espanyol en Balaídos.

Ahora le esperan cuatro rivales que están en apuros en la clasificación (Sporting, Betis, Espanyol y Granada) y tres que pelean por puestos europeos (Athletic Club de Bilbao, Málaga y Atlético de Madrid). El equipo andaluz es octavo, a ocho puntos de los celestes, por lo que parece improbable que pueda limar esa diferencia en tan pocas jornadas.

Ese mismo planteamiento utiliza Aspas para dar por perdidas las opciones del Celta de alcanzar la cuarta plaza, que ahora ocupa el Villarreal, con 57 puntos. "A día de hoy está muy difícil. Tendrías que hacer pleno" y esperar a que fallase el equipo castellonense, que aventaja en ocho a los célticos.

Si mantiene la quinta plaza que ahora ocupa, o finaliza en la sexta, el equipo vigués se aseguraría la participación en la próxima edición de la Liga Europa (antes denominada Copa de la UEFA). Los celestes se despidieron de esta competición el 14 de marzo de 2007 en Bremen, tras caer por 2-0 ante el Werder.

Los célticos se encuentran muy cerca de regresar al torneo continental. Se quedarían fuera si concluyen en el séptimo lugar y el Athletic de Bilbao o el Sevilla se sitúan por debajo de esta posición y conquistan la Europa League, en la que son rivales en los cuartos de final. La otra variable es que el equipo de Unai Emery no concluya entre los siete primeros clasificados y conquiste la Copa del Rey ante el Barcelona. En los demás casos, los de Berizzo tendrían acceso a esta competición a través de una previa. Para evitar este escalón inferior, que además le obligaría a adelantar el inicio de la pretemporada, el Celta se ha empeñado en defender la quinta plaza. La sexta también le valdría, pues le mandaría directamente a la fase de grupos. El objetivo está cerca, solo tiene que repetir el mismo final de curso que en las tres pasadas temporadas. En el último lustro, con 60 puntos tendría asegurada cualquiera de esas dos plazas.