El coliseo vigués se convirtió en los minutos previos al derbi gallego en la capital de Galicia. El himno resonó en el estadio vigués. Miles de gargantas entonaron la canción que une a todos los gallegos. El derbi gallego daba un nuevo paso hacia la concordia, hacia un buen ambiente que TVE decidió obviar.
La cadena encargada de retransmitir los partidos en abierto no emitió uno de los momentos más especiales de un enfrentamiento que ha ido ganando en cordialidad en los últimos tiempos. Una de las claves de la buena sintonía entre ambas entidades reside en Carlos Mouriño. Los viajes conjuntos de las categorías inferiores o la buena sintonía mostrada entre el máximo mandatario del Celta y su homólogo en la entidad coruñesa, Tino Fernández, ha permitido dar un paso determinante para que el derbi se convierta en la gran fiesta del fútbol gallego.
En A Coruña se escribió un nuevo episodio en la ida con el himno gallego. Balaídos no podía ser menos. Tocaba consolidar esas sensaciones. Y Vigo y el celtismo no defraudaron. Recibieron con banderas a los dos equipos y posteriormente llegó el momento de centrarse en lo que une a Celta y Deportivo. Una pena que TVE, la cadena de todos y que pagamos todos, "regatease" semejante momento.
