Las cañas invaden los ríos gallegos

Cerca de 60.000 cañas poblarán los cerca de 35.000 kilómetros de toda la red fluvial gallega para estrenar una campaña de previsión optimista en la que el caudal abundante y las temperaturas agradables, pese a la lluvia, presentarán condiciones óptimas para las capturas. La previsión será similar a la del año anterior.

"Arrancamos la temporada con la ilusión de todos los años, de llegar al río y pescar", indica José Luis González, delegado de la Federación Gallega. "Luego con los días se irá viendo cómo va la campaña, pero las previsiones son buenas porque los ríos presentan este año agua abundante, no como el pasado", subraya.

En Vigo, las zonas predilectas por los pescadores serán el embalse de Zamáns, el Verdugo, el Oitavén o el Miñor. También cabe destacar el Umia, el Lérez y Forcarei, con especial mención al río Deva, a su paso por Arbo, o el Tea.

Esta campaña se presenta con algunas novedades, como los nuevos tramos de Guntín y Quinte, o como el nuevo coto de pesca sin muerte en Carobeiro, en el río Deza. Además, sigue incrementándose la oferta de tramos de pesca sin muerte en las cuatro provincias.

Además, el río Furelos se incluye en las masas de agua en las que se prohíbe el cebo natural a partir del 1 de julio. Por su parte, el embalse de Sabón se incluye en el régimen especial de embalses autorizados todo el año. Régimen del que sale el de Brandariz.

El periodo hábil para la pesca de salmón irá desde el 1 de mayo hasta el 31 de julio, pero podrá adelantarse el fin de la temporada en función de las cuotas de captura. En los tramos compartidos del río Eo la temporada se inicia el 24 de abril y acabará el 15 de julio, en acuerdo con las autoridades del Principado de Asturias.

Las cuotas de captura están establecidas en un ejemplar por persona y día, con una dimensión mínima de 40 centímetros. Las cuotas anuales en los Ríos Lérez y Ulla serán de 15 ejemplares en el primero y 60 en el segundo. En el Mandeo, los ejemplares serán 5, 15 en el Masma, 8 en el Miño, y 10 en el de Salmeán, en el Eo. En el resto de los cotos autorizados en el Eo no se establece cuota anual de captura.

En relación a los cebos autorizados pueden ser naturales, como las lombrices y quisquillas, o artificiales, como la mosca artificial, la cucharilla, peces artificiales o similares. Para la pesca sin muerte del salmón se autoriza solamente un anzuelo.

En cuanto al reo, la temporada hábil arranca el 1 de mayo y acabará el 31 de julio. La temporada se prorrogará, sin embargo, en los cotos de Celeiro, Noia, Noval, Ombre, Padrón, Ponte do Porto, Ribeiras, Segade, Traba, Viveiro (lotes 2 e 3), e Xubia, donde la campaña finalizará el 30 de septiembre. En los cotos de Betanzos y Lambre se prorrogará hasta el 15 de septiembre y en los cotos de Monteporreiro, Ponte Arnelas, Ximonde, Santeles entre el 1 de agosto y el 30 de septiembre solo se permitirá la modalidad de pesca sin muerte.

Sobre los cebos, se permiten todos los naturales excepto todo tipo de huevos de peces y el pescado natural y artificiales como la mosca, la cucharita y peces artificiales o similares. En las aguas salmoneras no se permiten otros cebos que los autorizados para la pesca del salmón.

La temporada de la trucha arranca el 20 de marzo y acaba el 31 de julio. En los cotos intensivos, cotos y tramos de pesca sin muerte y cotos con convenios de colaboración se prolongará hasta el 30 de septiembre, pero solo en la modalidad de pesca sin muerte. En las aguas salmoneras, en las de reo o en las de montaña la temporada no empieza hasta el 1 de mayo.

Por norma general se podrán capturar 10 ejemplares por persona y día con una talla mínima de 19 centrímetros y los cebos son los mismos que los de la temporada pasada, aunque existen excepciones.

Además, la zamborca, el cangrejo rojo americano, el cangrejo señal, los ciprínidos y la perca negra mantienen el mismo régimen que el de la anterior campaña, con la excepción de que en el caso de los ciprínidos se limita a un máximo de dos anzuelos por caña con carácter general para los embalses en los que se autoriza la pesca todo el año. La veda se mantiene en la anguila y el meixón.

Se declaran los lunes como inhábiles para la pesca, excepto los festivos nacionales o autonómicos. Los jueves no festivos de la temporada hábil solo se podrá pescar en la modalidad de pesca sin muerte en todas las masas de agua, expecto el 24 de marzo (Jueves Santo), que será hábil según la modalidad de pesca autorizada en cada masa de agua.

En relación a las horas, solo se podrá practicar la pesca en el periodo comprendido entre una hora antes de la salida del sol y una hora después de la puesta. Las horas están establecidas en la página web de MeteoGalicia.

Muchos serán los aficionados que desafíen a la lluvia y se acerquen a los ríos para estrenar una campaña en la que no faltará la ilusión por una gran jornada de capturas.

Mucha ilusión pese a las trabas de siempre

La contaminación, las fuertes lluvias, los cormoranes y bisones y una normativa compleja, los caballos de batalla La campaña se inicia mañana con una previsión optimista en la que cerca de 60.000 pescadores estrenarán el curso con buenas capturas

• La temporada arranca cargada de ilusión pero no exenta de cierta discordia por la nueva normativa que regula la pesca a punta de vara, una modalidad tradicional en Galicia, que se practica sobre todo en arroyos y ríos pequeños. En esta modalidad se emplean cañas fijas, exentas de carrete y con un trozo de sedal coronado por una mosca, lo que concede gran facilidad al pescador para colocar el señuelo en un punto concreto del río.El comité provincial de Ourense ha propuesto que en esta práctica, en la que se utilizan unas cañas de entre 8 y 13 metros, el sedal tiene que medir como mínimo la mitad de la caña, lo que complica la labor del pescador. Miguel Piñeiro, periodista, escritor y pescador, asegura que esta medida, apoyada por la Federación Gallega de Pesca, ha creado cierto malestar en el colectivo, que incluso ha iniciado recogidas de firmas en varios puntos de Galicia para que se dé marcha atrás con dicha normativa, aunque este año sí que estará en vigor."Ya que existe una política de tallas y cupos, que se controle el cumplimiento de las normas y no que se ponga en marcha un sinsentido como este que ha cabreado a mucha gente", solicita Piñeiro.El problema, según José Luis González, delegado de la Federación, es que hay "poco personal" para controlar tantos kilómetros de ríos en Galicia. Se trata, de todos modos, de una práctica que se utiliza, sobre todo, en verano y con la que no se espera debate en este arranque.Según Piñeiro, desde 2005 se han establecido muchas normas que desaniman al pescador. "Hay algunas que no tienen justificación científica, como la que indica que la trucha tiene que medir 17, 19 o 21 centímetros en función del tramo del río en la que es capturada. Es una norma sin sentido ni base científica", insiste.Otra de las grandes preocupaciones de los pescadores está en las capturas del futuro. "Este año pescaremos las truchas nacidas hace dos o tres años, pero estamos preocupados por las que pescaremos dentro de tres, porque este año las riadas de enero han arrasado con todo", se lamenta. La contaminación, la presencia de cormoranes y bisones americanos en los caudales, o el furtivismo son otros de los males que apagan la ilusión de los pescadores que cumplen la normativa a rajatabla y que se ven perjudicados por una normativa compleja, como la adquisión telemática de las licencias que frena sobre todo a la gente mayor que no tiene acceso a las nuevas tecnologías. Piñeiro espera que en el proceso de elaboración de la nueva ley de pesca se escuchen las reivindicaciones del colectivo de pescadores para sacar adelante una ley valiente y "que pueda ser útil por muchos años".