Eibar y Rayo empataron en Vallecas en un duelo que permite al conjunto vasco acariciar la permanencia y complica al equipo madrileño, que se adelantó en el marcador por medio de Zé Castro y recibió la igualada antes del descanso con un tanto del argentino Gonzalo Escalante.

Con seis bajas, algunas de ellas muy importantes como la de Keko, el Eibar se presentó en Vallecas dispuesto a relanzar el vuelo tras un último mes y medio nefasto, en el que perdió siete de los ocho partidos disputados.

Trashorras botó un córner desde el costado derecho al primer palo y Zé Castro de cabeza le ganó la partida a su defensor para rematar un balón que Riesgo, pese a que lo tocó, no pudo atajarlo.

A los 35 minutos, el conjunto armero logró igualar la contienda por medio de Escalante, que, solo y a la carrera, remató picado de cabeza un centro desde la izquierda de Juncá. Para la segunda mitad, Paco Jémez movió el banquillo, sacó del césped a Ozbiliz y a Nacho, y puso en liza a Embarba y a Quini. Lo intentaron y el partido pudo caer para cualquier lado.