El Balonmano Porriño ya es cuarto en solitario tras un tramo impecable de temporada. Las porriñesas sentenciaron en una gran segunda parte a un Cleba León que acusó muchísimo la expulsión antes del intermedio de Marta Méndez y consiguieron así su quinta victoria consecutiva. Un triunfo que, además, les permite asentarse en la zona noble de la clasificación tras la derrota del Alcobendas ante el Guardés (21-23).

Después de una primera parte igualada, con los dos equipos mucho más entonados en ataque que en defensa, el conjunto de Abel Estévez vio cómo el partido empezaba a decantarse decisivamente de su lado en la última acción del primer tiempo. Era un contraataque claro de Cecilia Cacheda en el que Marta Méndez contacta con ella por detrás y los árbitros no dudan al castigar la acción con tarjeta roja directa para la jugadora visitante y siete metros para un Balonmano Porriño que aprovechó el penalti para incrementar su renta al descanso (23-17, min.30).

Debido al golpe, el técnico porriñés perdía una de sus piezas puesto que Cecilial Cacheda ya no pudo jugar más en el resto del encuentro pero el daño para el Cleba León fue mucho mayor. Definitivo. Las visitantes sin Marta Méndez se mostraron perdidas en defensa al carecer de su referencia, la jugadora que habitualmente defiende en el centro. Además, las locales no bajaron su nivel de inspiración en ataque con lo que el partido quedó muy pronto completamente decidido (30-21, min.45).

Así, Abel Estévez aprovechó las circunstancias para dar muchos minutos a las juniors Sandra López y Gemma y Nuria Martínez y, además, aprovechó los últimos cinco minutos para que Nekane Terés empezase a recuperar sensaciones y tuviera su primer contacto con la pista después de su lesión.