El Celta da otro paso hacia Europa después de ganar por primera vez en Getafe (0-1), en un partido de poco fútbol que resolvió Nolito en el minuto 70 tras un saque de esquina. La victoria devuelve a los célticos a la quinta posición en la tabla clasificatoria,a la espera del resultado que obtenga hoy el Sevilla en el Camp Nou. Los de Berizzo recuperan la plaza que cedieron el mes pasado al conjunto andaluz tras caer en otro de esos campos que casi siempre se le atragantan, Vallecas.

Desde ayer, el Coliseum Alfonso Pérez ha dejado de ser tan inhóspito para los célticos como la casa del Rayo. Se presentaron a la cita con ganas de incidir en la herida del Getafe para poder poner fin a esa mala racha. El equipo de Fran Escribá llegaba apurado al partido, después de encadenar cinco derrotas, pero convencido de que el rival seguiría pinchando una vez más, como antes le ocurriera bajo la dirección de Paco Herrera, de Luis Enrique Martínez y el curso pasado del propio Eduardo Berizzo. Pero en esta ocasión, el técnico argentino buscó motivaciones para convencer a sus jugadores de que era posible ganar en el campo de los azulones. "Es un aliciente más", dijo Berizzo en referencia a los deseos de dejar atrás esa trayectoria negativa en Getafe, como el año anterior había hecho su equipo con el Camp Nou. Y a un Celta en constante crecimiento desde que retornó a la máxima categoría, los retos le motivan y no parece tener límites en su progresión.

Con Nolito y Marcelo Díaz sin poder disputar el partido completo, Berizzo apostó por Radoja y por Bongonda. El sacrificado en la medular por la entrada del serbio fue el danés Daniel Wass, pues a Orellana había que hacerle un hueco en la mediapunta tras cumplir la sanción. Aspas y Guidetti repetían en el ataque tras su extraordinaria actuación ante el Eibar.

Berizzo elegía su mejor once para asaltar una plaza inexpugnable para los célticos. Y en la primera jugada del partido parecía que la mala racha continuaría un año más en un campo azotado ayer por el viento y con un césped que perjudicaba la circulación del balón.

El Celta salió frío al campo y Sergio Álvarez estuvo a punto de meter dentro un balón que centró sin peligro del lateral Yoda desde la izquierda. El larguero evitó que la pelota se colase en la portería del conjunto celeste.

Superado el susto inicial, ninguno de los dos equipos fue capaz de gobernar un partido con muchas imprecisiones y no apto para aguantar despierto desde el sillón. Todo pudo cambiar para los célticos si el árbitro sancionase la mano de Juan Rodríguez dentro del área getafense. Los locales respondieron con una acción de ataque que cogió desubicada a la defensa del Celta. Sergio realizó una gran intervención ante Sanabria. El joven atacante madrileño quería celebrar la renovación de su contrato con una gran actuación. Lo intentó en muchas fases del partido, pero el intenso pulso que mantuvo con Jonny acabó en tablas, o quizás favoreció al vigués a los puntos.

A la media hora de partido, el Getafe reclamó penalti por un balón que Sergi Gómez despejó con el cuerpo.

A pesar del desgobierno en el centro del campo, la defensa del Celta resolvía todas las complicaciones. Entonces, los rivales optaron por sorprender a Sergio desde la distancia. Lo intentaron sus mediocentros, Juan Rodríguez y Lacen, pero sin encontrar portería.

Tampoco acertó entre los tres palos Bongonda cuando a dos minutos del descanso se encontró con un balón servido por Orellana. El belga remató de cabeza fuera cuando tenía muchas opciones para superar a Guaita.

El primer tiempo se cerró con una gran ocasión de Álvaro Vázquez. El delantero mandó fuera el balón centrado por Víctor Rodríguez.El mediapunta hacía daño entre líneas, ante los espacios que dejaba la medular céltica, donde Pablo Hernández se multiplicaba en la contención y en intentar armar el juego ofensivo.

Y si en el arranque del primer tiempo pudo marcar el Getafe, el Celta tuvo su primera gran ocasión nada más iniciarse la segunda parte. Bongonda, que había destruido físicamente a su marcador, Damián Suárez, lanzó pegado al palo izquierdo de Guaita. El balón superó al guardameta del Getafe pero en la línea de fondo apareció Yoda para evitar el primer gol del partido.

El equipo madrileño acusó el golpe y permitió que el Celta puediese gobernar un partido que se le ponía de cara. Solo había que tener paciencia y esperar las ocasiones para rematar a un rival que perdía las ilusiones para evitar la sexta derrota consecutiva y la quinta jornada seguida sin marcar.

En el minuto 52, Fernández Borbalán tampoco vio otro penalti claro en el área de Guaita, por una mano de Víctor Rodríguez. El Celta dominaba y era cuestión de tiempo encontrar la portería rival. Sin embargo, Berizzo quiso dar prioridad al proceso de recuperación de Nolito y antes de la hora de juego dio entrada al andaluz por Guidetti. El cambio obligó a Bongonda a pasarse al costado derecho. El segundo lateral del Getafe que vigilaba al belga, Emiliano Buendía, respiró tranquilo, pues ya arrastraba una tarjeta amarilla y había sido incapaz de frenar al céltico, que se diluyó en la otra banda hasta su sustitución por Wass.

Se ganó un enemigo el equipo vigués, pues Buendía se sumó al ataque y la banda derecha se convirtió en una fuente de problemas. Además, se activó de nuevo Sarabia, que estuvo a punto de superar a Sergio Álvarez con un balón que salió rozando el palo.

Pero entonces apareció Orellana para obligar a Guaita a realizar una estirada y evitar el gol. El chileno sacó el córner, que Hernández tocó con la cabeza hacia Nolito, que ante el guardameta del Getafe lo superó también con un remate de testa. Por fin, el Celta abría el marcador y comenzaba a empaquetar la primera victoria en un campo inhóspito. Orellana y Wass pudieron abrir más brecha, pero fue suficiente con el noveno tanto de Nolito para acabar con una mala racha en Getafe y recuperar la quinta plaza. Europa está más cerca para el Celta.