Durante su larga comparecencia ante los medios, el presidente del Celta puso especial énfasis en destacar el compromiso del club con la cantera a pesar del bajón que han sufrido este temporada los resultados de las categorías inferiores, especialmente preocupantes en el conjunto juvenil y, sobre todo, en el Celta B, cuyo entrenador ha sido recientemente sustituido y ocupa actualmente puestos de descenso. "La cantera es nuestro eje principal, nuestro futuro", aseguró Mouriño, que se mostró partidario de mantener una plantilla corta, incluso si el equipo se clasifica para Europa, para favorecer el flujo de canteranos al primer equipo. " Las plantillas cortas han dado oportunidades a nuestros canteranos", subrayó. El mandatario reconoció que la promoción al filial de futbolistas todavía en edad juvenil que se entrenan y han debutado con el primer equipo, como Diego Alende o Pape Cheikh, han debilitado esta temporada el conjunto juvenil, aunque confesó que está "muy preocupado" por la delicada situación del Celta B. Mouriño confesó estar un tanto indeciso. "A lo mejor tenemos que sacrificar un año la cantera para tratar de subir al filial a Segunda División A porque, si lo consigues, el paso de los canteranos al primer equipo sería más fácil. Pero es una decisión muy complicada que además tendría que estar acompañada por una economía que ahora no tenemos", dijo.